El local de O Grove es un templo de la música en directo que pone una banda sonora de calidad al verano arousano
17 ago 2024 . Actualizado a las 22:59 h.Si hay un lugar en el que todo es posible, ese es El Náutico de San Vicente. Este templo de la música en directo, situado al pie de la playa de A Barrosa (O Grove), fue escenario este sábado por la tarde de un concierto sorpresa de Vetusta Morla. El grupo, que el viernes actuó en Vigo, tomó las tablas del mítico establecimiento arousano alrededor de las seis de la tarde, invocando a sus fans con los acordes de Los Buenos.
La posibilidad de que el grupo acabase recalando en A Barrosa llevaba días dando vueltas en el ambiente. Y así fue. Desde primera hora de la tarde estaba claro que en el interior del local iba a ocurrir algo especial: una actuación en la que grupo y público estuvieron, casi, piel con piel, compartiendo las vibraciones de los temas más populares de la banda: Copenhague, Finisterre, Maldita dulzura, Cuarteles de invierno... Un exquisito equilibrio entre sus temas de siempre y los de su nuevo álbum, Figurantes, fue la marca del concierto.
Pero además de al público que llenaba el recinto del local, la música de Vetusta Morla llegaba también a quienes estaban disfrutando de la tarde de sábado en la playa sobre la que abre El Náutico y que no perdían detalle de lo que pasaba en el interior. Bajo semejante escrutinio, estaba claro que la presencia del grupo no iba a pasar desapercibida. Y no pasó, claro. Pucho, el vocalista de la banda, hizo varios guiños a la gente que los escuchaba desde la arena de A Barrosa.