Un perro de presa sin bozal destroza a un can de pequeño tamaño en pleno paseo a Carril

VILAGARCÍA DE AROUSA
El ataque, que se rodeó de una trifulca entre sus propietarios, tuvo lugar ante la mirada de un grupo de niños de cumpleaños
10 may 2015 . Actualizado a las 13:03 h.Hace un par de meses, el surgimiento de un perfil en Facebook para la denuncia de ataques de perros agresivos -la iniciativa apuntaba, en realidad, más a sus propietarios que a los animales- desencadenó una notable controversia en Vilagarcía. Tras lo ocurrido ayer en el paseo marítimo que une el centro de la ciudad con Carril, será difícil que alguien cuestione la conveniencia de poner límites a quienes se pasean con este tipo de mascotas sin guardar las mínimas medidas de seguridad. Un can de presa, un cruce de pit bull, destrozó a dentelladas a un bulldog francés, un ejemplar de pequeño tamaño, a plena luz del día, ante la mirada atónita de un grupo de niños de corta edad. Los chavales celebraban un cumpleaños en el pinar de A Concha.
Testigos de lo ocurrido señalan que fue el bulldog francés, que paseaba libremente a cierta distancia de su dueño, el que se aproximó al cruce de pit bull, que su propietario sujetaba con una correa pero no portaba la correspondiente sujeción bucal. La aproximación no debió de gustarle un pelo al dueño del perro peligroso, que llegó a propinar una patada al otro animal.
Inmediatamente, el dueño del bulldog acudió a recoger a su mascota y, afirman quienes contemplaban la escena, pedir disculpas. El hombre se encontró, sin embargo, con una actitud no demasiado amistosa por parte de sus interlocutores. El propietario del pit bull mestizo le habría propinado un empujón mientras dos jóvenes que le acompañaban se abalanzaron sobre él.
En un momento dado, el dueño del bulldog francés quiso repeler los empujones, lo que provocó que su mascota se le cayese de los brazos. Una vez en el suelo, el pit bull cruzado entró en acción para lanzarse sobre el pequeño can, que sufrió durísimas heridas mientras sus respectivos propietarios se enzarzaban en una trifulca que acabó frente al pinar de la playa y los atónitos pequeños que participaban en el aniversario.
Intervención de la policía
El episodio motivó la intervención de dos patrullas de las policías local y nacional. Pero ello no impidió que el bulldog francés fuese literalmente destrozado por las mandíbulas de su agresor. Tanto su boca como su espalda quedaron muy dañadas. Su aspecto no hacía, subrayan un grupo de testigos, concebir demasiadas esperanzas de que sobreviviese. Mientras, de las fauces del cruce de pit bull manaba la sangre de su víctima.
Un perro sin correa, otro sin bozal, en pleno paseo marítimo, muy concurrido en una soleada tarde de sábado tras días y días de lluvia, se antojan abundantes ingredientes para la reflexión.