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Antón Paz vuela a los Juegos de Río con pasaje heleno

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

CEDIDA

El vilagarciano dirigirá al Nacra griego, rival en el agua de un Fernando Echavarri con el que se colgó el oro olímpico en Pekín

02 jun 2016 . Actualizado a las 13:49 h.

Las vueltas que da la carta náutica de un campeón olímpico. De pelear sin éxito durante seis años por tripular el buque insignia de su país, España, en pos de la conquista del oro escondido en lo alto del cajón del podio del 49er allende los mares del Atlántico en Río de Janeiro, a acceder a la gran fiesta del deporte mundial en puerto brasileño con salvoconducto griego tratando de derrotar al navío hispano comandado por quién fue su patrón, y sin embargo amigo, en el feliz asalto al medallón dorado de la clase Tornado en Pekín 2008. El vilagarciano Antón Paz, superado la semana pasada por el cántabro Diego Botín y el también gallego Iago López en el esprint final por la plaza hispana de 49er en la Delta Lloyd Regatta de Medemblick, Holanda, se guardaba ese as en la manga solo al alcance de los que han sido, son y serán por méritos propios. Al contrario que su hermano y patrón Carlos, él sí participará en la próxima edición de los Juegos Olímpicos. Como entrenador del barco heleno de la clase Nacra 17, que tendrá en agosto entre otros rivales en las aguas de Río al manejado por su compañero de gesta en Quingdao, el pontevedrés Fernando Echavarri, con el que Antón alcanzaba la primera medalla olímpica de la vela gallega. La canaria Tara Pacheco, patrona del 470 español en Londres 2012, es ahora la escudera del lerezano.

La paradoja de la presencia de Antón Paz en la inminente nueva edición de los Juegos resulta múltiple. A finales de marzo, cuando nada sabía aún de su nueva y última oportunidad de luchar por una plaza en Río en 49er que su hermano y él habían obtenido para el equipo nacional español en el Mundial de Santander 2014, Antón había empezado a explorar una de las varias salidas laborales que tiene en mente ante su probable adiós como regatista de vela olímpica este año. La de entrenador. Contratado por la pareja rusa formada por Sergey Dzhienabaev y Daria Ivanova para ayudarles a hacerse con la única plaza ya en juego en la clase Nacra 17 para los países europeos en el Trofeo Princesa Sofía de Palma de Mallorca. Sus fugaces pupilos no llegaron a buen puerto, viendo la popa del navío griego patroneado por Sofia Bekatorou, oro en 470 en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y bronce en Yngling en Pekín, y Michalis Pateniotis, olímpico en 49er, engodar triunfante el pabellón heleno en Río en el que era su primer campeonato juntos.

Un mes después, y tras ayudar al Nacra 17 neozelandés que irá a Brasil en agosto con la elección de material en una Semana Olímpica Francesa que Gemma Jones y Jason Saunders empleaban como test, Antón inició en la regata de Hyéres su relación con Bekatorou y Pateniotis por mediación del diseñador de barcos pontevedrés Gonzalo Redondo. «Quedaron contentos», dice Antón Paz, y con ellos marchó a Río el mes pasado para empezar el tramo final de su afinación olímpica.

Con la breve interrupción de la regata selectiva de 49er en su último intento de viajar a Río a bordo de un barco y no en zódiac, el arousano volverá a Brasil el día 8. «Teñen que traballar ao 100 % para tentar loitar por unha medalla. Non hai moito que perder, e si moito que gañar», afirma Antón. Sobre su cercana guerra naval con su amigo Fernando, declara que «o ideal para min sería que os dous barcos conseguiran medalla. Pero», debe aclarar, «eu traballo para o equipo de Grecia».