El Mozo de Arousa aspira a contar con artistas de Portugal en el congreso de la AEV 2024 que se celebrará en Vilagarcía
18 dic 2023 . Actualizado a las 20:36 h.La noticia saltaba el miércoles: Vilagarcía será la sede del congreso de la Asociación de Eurovisivos de España 2024 y el responsable de ello es Borja Santamaría, más conocido por Borjamina. Este hombre y este nombre se han hecho famosos gracias a la participación de los Mozos de Arousa (Borja, Raúl y Bruno) en el concurso televisivo Reacción en cadena, y su popularidad pesó a la hora de que la candidatura de su ciudad fuese la elegida. «Ayudó por que me conocían de la tele y agradezco que hayan puesto su confianza en mí», comenta Borja.
El congreso será dentro de un año, aprovechando el puente de la Constitución, y será la primera vez que se haga en Galicia, lo cual podría contribuir a darle mayor proyección. «Mi baza es esa, al ser una ciudad pequeña pienso que la gente va a involucrarse más; en ciudades tan grandes como Madrid, donde hay tantas cosas, pasa más desapercibido».
De entrada, en la directiva de la asociación ya han quedado sorprendidos con la repercusión mediática que ha tenido la noticia y en ello también tiene mucho que ver el fenómeno Mozos de Arousa. Raúl, Bruno y Borja van camino de ganar el millón de euros encadenando palabras —en la emisión del viernes alcanzaron los 957.000 euros—, un dinero que emplearán, al menos en parte, en la compra de un local para su asociación: Arousa Moza.
Tiene esto relación con Eurovisión porque la intención e Borjamina es que el congreso se celebre ya en la nueva sede, aunque todo va a depender de cuándo dispongan del dinero. El suculento premio no llegará a sus bolsillos hasta tres meses después de la emisión de su último programa y, al ritmo que llevan, quizás continúen otro año más en la parrilla de Telecinco. Entre tanto, los Mozos siguen buscando la mejor opción. «Tengo algo mirado, pero los precios están muy caros. La verdad, lo esperaba más fácil».
Sea en un local u otro, los eurofanes, los artistas y profesionales vinculados al festival que arrastra el congreso anual de la AEV conocerán Vilagarcía. A la edición del 2023 que se acaba de celebrar en Madrid acudieron, por ejemplo, Blanca Paloma, Amaya Saizar e Iñaki de Pablo. Del cartel para el 2024 todavía es pronto para hablar, pero Borja avanza algunas claves: espera contar con artistas gallegos vinculados a Eurovisión, caso de Lucía Pérez, As Tanxugueiras y Yoli Saa (la única representante gallega en el Benidorm Fest de este año) y crear una suerte de Eje Atlántico eurovisivo. «Teniendo en cuenta que estamos al lado de Portugal me gustaría mucho contar con artistas de allí». Va a ser difícil convencer a Salvador Sobral, pero con el entusiasmo que pone Borjamina en todo lo que hace no conviene descartar nada.
En su casa siempre se vio Eurovisión. Conoció la gloria de Rosa y los demás triunfitos y supo de las azañas de Massiel y Salomé en el festival, pero fue a partir del 2019 cuando se convirtió al credo eurovisivo. El festival de aquel año lo pilló en Polonia y no dudó en sacar la entrada. Unos meses después se incorporó al club de los eurofanes españoles —ser socio solo requiere el pago de una cuota de 15 euros al año— y en 2022 se fue a Turín para ver a Chanel. «Fue una experiencia impresionante, con artistas de todos los países y unas puestas en escena increíbles. Es una semana que se vive a tope rodeado de gente que le gusta lo mismo que a ti».
Para quien los tacha de frikis, Borja responde sin estridencias: «Somos como todo el mundo que tiene una pasión. Es como un aficionado al fútbol en España que se ve la liga rumana. Con Eurovisión hay quien no se pierde una gala y quien solo sigue la preselección en España». Por lo que a él respecta ya tiene las entradas para ir en mayo a Suecia y, por supuesto, está muy pendiente del Benidorm Fest que se celebra dentro de un mes.
Será un año intenso porque, además de disfrutar del espectáculo, le tocará coordinar la organización de un congreso al que están llamados los 200 miembros de la asociación y demás legión eurovisiva. Como ocurrió con el topónimo Arousa en el concurso televisivo, Borjamina espera colocar a Vilagarcía en el mapa del fenómeno eurofán ibérico e implicar a toda su ciudad. También al Concello, con el que las relaciones son mejores desde que Álvaro Carou está al frente de la concejalía de Xuventude, explica Borja. «Creo que es algo bueno que va a traer gente a Vilagarcía y que no vamos a tener la puertas cerradas».