Aunque no es lo habitual, también hay concellos lo suficientemente saneados como para permitirse el lujo de no deber un solo euro a bancos y cajas. Según los datos facilitados por la Central de Información de Riesgos del Banco de España, son un total de 51 municipios los que, a principios de año, figuraban sin cargas de este tipo. De ellos, 14 están en A Coruña, 11 en Lugo, 16 en Ourense y 10 en Pontevedra. Algunos son Dumbría, Zas, Touro, Trazo y Rodeiro.
La delicada situación económica que atraviesan otros ha obligado a la Federación Galega de Municipios y Provincias a instar a la Xunta para modificar el modo por el que se ponderan las variables para calcular qué le toca a cada concello de los ingresos de la comunidad. La Administración autonómica se ha comprometido a tener en cuenta la dispersión poblacional y el envejecimiento, factores que encarecen mucho la prestación de servicios, sobre todo en los municipios del entorno rural, como Lousame, Outes, Carnota o Mazaricos.