El candidato se despidió del cargo arropado por sus compañeros
18 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Manuel Ruiz Rivas era hasta ayer la voz del Partido Popular en el Parlamento gallego. Tal y como estaba previsto, el diputado ribeirense dejó el cargo para centrarse en la que ahora es su mayor meta: la conquista de la alcaldía de Ribeira. «A miña cabeza xa estaba máis no meu concello que en ningún outro lado», manifestó. Tras sus palabras llegó el aplauso de muchos de sus compañeros en la Cámara gallega, que ayer se desplazaron hasta Santa Uxía para arropar al alcaldable ribeirense.
Con la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, a la cabeza, los diputados populares mantuvieron una reunión en Ribeira. Ruiz explicó que en los últimos años hicieron un esfuerzo por llevar la actividad parlamentaria más allá de los confines de O Hórreo y que a él le hacía una especial ilusión que la última comisión que presidía como portavoz fuese en su ciudad. De ahí que hubiese un desplazamiento masivo a Santa Uxía.
Ruiz señaló por pasiva y activa que «sempre quixen servir ao meu pobo» y que a partir de ahora estará centrado totalmente en Ribeira. Aún así, conserva su puesto de parlamentario, que abandonará si sale elegido alcalde. «Obviamente, se tomo posesión como rexedor estarei obrigado a deixar o escano, e aínda que non o estivese faríao igual, xa que facer as dúas cousas non sería posible», dijo.
La sucesión
Al preguntarle por quién le sucederá en el puesto, Ruiz dijo que la duda se despejará antes del martes y que si le preguntan a él tiene tantos candidatos como compañeros de partido en el Parlamento.
Ruiz Rivas no solo tuvo palabras de agradecimiento para sus colegas de filas. También se acordó de la oposición. Así, nombró a otros portavoces parlamentarios, como el caso de Xaquín Fernández Leiceaga, Ismael Rego, Carlos Aymerich o Abel Losada. «Creo que todos fixemos unha labor importante e que máis aló das discrepancias demostramos que se pode chegar a acordos», enfatizó.