El informe policial sobre la Cofradía de Noia no deja títere con cabeza en muchos sentidos. Por ejemplo, se citan varias embarcaciones, en teoría todas ellas relacionadas con los gestores de la cofradía -aunque, en realidad, algunas pertenecen a miembros de la oposición-, y se dice que suelen coger los topes máximos de capturas y que incluso se exceden de esos cupos. Concretamente, se habla del barco en el que trabaja el patrón mayor, Caramuxa, y se dice que quienes están enrolados en él -el dirigente del pósito y su mujer- suelen alcanzar los cupos máximos de capturas e incluso se pasaron en seis kilos durante la campaña. La cofradía mostró ayer todos los partes de esa embarcación para demostrar que no es cierto que siempre cojan los topes. De hecho, enseñaron también las ventas de otras embarcaciones y la conclusión es clara: Santiago Cruz y su mujer capturan unas cantidades de marisco muy similares a las del resto de socios. Al principio de la campaña suelen alcanzar los máximos kilos de berberecho, no de almeja, y al final ya no lo hacen.
Por otra parte, la cofradía también explicó que un barco al que la policía achaca que se pasó en 138 kilos del límite legal de capturas, lo que le ocurrió es que enroló a un tercer tripulante durante un tiempo y su cupo aumentó, por lo que habría cumplido la ley.