El Camino de Santiago une a la localidad con dos poblaciones
con las que busca hermanarse
21 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.
Los noieses que no las conozcan ya pueden empezar a familiarizarse con los nombres de Dartmouth y Salmiech porque más pronto que tarde estarán hermanados con los habitantes de ambas localidades, una inglesa y la otra francesa, con los que Noia tiene vínculos históricos que el gobierno local quiere estrechar y potenciar.
La relación de la villa noiesa con Dartmouth es más conocida y está directamente vinculada con el Camino de Santiago del que tanto se habla últimamente. El hermanamiento daría un espaldarazo enorme al Portus Apostoli y permitiría abrir vías de colaboración con la localidad de la que partió la primera peregrinación a Santiago desde Noia. Existe documentación fechada en el año 1147 que da cuenta de la travesía de doscientas embarcaciones que partieron de la localidad inglesa rumbo a las cruzadas y que tras arribar en el puerto noiés emprendieron el camino hasta Compostela para agradecer al Apóstol el haber sobrevivido a una gran tormenta en alta mar.
La relación con Dartmouth está, pues, más que acreditada, y ahora falta que desde esa población acrediten su vínculo con Noia aportando documentación en este sentido. En esta fase está el proceso de hermanamiento. Desde el Concello ya se han mantenido algunos contactos informales y ya está preparada una carta dirigida a los gobernantes de la ciudad inglesa para poner en marcha la maquinaria que, esperan en el gobierno local, unirá definitivamente a ambas poblaciones.
Por parte del ejecutivo local, el edil José Pérez explicó que Dartmouth es una pequeña localidad costera y que para sus habitantes también es una oportunidad turística la vinculación con Noia y con el Camino de Santiago. No en vano, uno de los objetivos del hermanamiento es establecer actividades de intercambio y viajes que favorezcan el flujo de vecinos de uno y otro municipio.
Turismo de calidad
En este sentido, Pérez indicó que se pretende apostar decididamente tanto por la ruta del Camino Inglés como por un turismo de calidad, y eso pasa por potenciar la cultura. Añadió, además, que este tipo de destinos no están tan supeditados a las condiciones meteorológicas como los de sol y playa, de manera que también perdura más en el tiempo.
En esta filosofía encaja el otro hermanamiento que pretende materializar el gobierno con la localidad francesa de Salmiech. Su relación con Noia es quizá menos conocida que la de Dartmouth, pero está igualmente documentada. A muchos les sonará el arzobispo Berenguel de Landoira porque una de las calles del casco histórico noiés fue bautizada con su nombre. Fue además el encargado de consagrar la iglesia de Santa María A Nova en el año 1327 y era natural de la población francesa, que está situada en departamento de Aveyron, en el distrito de Rodez.
En este caso, también se han realizado ya contactos y, de hecho, algo se ha avanzado en las gestiones para llevar a cabo alguna actividad.
Ámbito educativo
José Pérez explicó que los primeros contactos con Salmiech se realizaron a través de una profesora y que entre las iniciativas que está previsto llevar a cabo el ámbito educativo tendrá un gran peso. Ya se ha hablado de la posibilidad de realizar algún tipo de intercambio estudiantil o bien de organizar viajes juveniles. También se buscará la posibilidad de ofertar paquetes turísticos a través de turoperadores.
De prosperar estos proyectos, ante Noia se abre un nuevo abanico de posibilidades a nivel turístico que podrían suponer un revulsivo para el municipio.
El municipio noiés ya está ligado a dos ciudades, una lusa y otra saharaui
De materializarse los dos hermanamientos que busca el ejecutivo noiés, serían cuatro las poblaciones ligadas oficialmente al municipio noiés. No en vano, desde hace años, la villa mantiene vínculos con la ciudad portuguesa de Estarreja y con la población de Mahbes, en el Sáhara. Los lazos con esta última se remontan a la época en la que Bieito González fue alcalde y se formalizaron en 1993, aunque en los últimos años apenas ha habido relación entre ambas. Y algo parecido ocurre con Estarreja, hermanada con Noia desde mediados de los años 80. A principios del 2015, el entonces alcalde, Rafael García Guerrero, y su segunda de abordo, Marisol Villar, realizaron un viaje a la localidad lusa para recuperar el contacto y, aunque se habló de nuevas visitas, no llegaron a producirse.