Este apacible lugar en primera línea de playa ha sufrido estragos por culpa de la mano del hombre y la falta de un mayor cuidado
06 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.No es uno de los puntos más concurridos de Ribeira, pero no desmerece en nada a los más visitados. No cabe duda de que el parque de A Corna, en Palmeira, se encuentra en una localización privilegiada de Arousa norte. Aunque no está excesivamente dotado de mobiliario urbano, cuenta con lo suficiente para disfrutar de una plácida jornada. Asadores, mesas y juegos para los más pequeños cubren las necesidades básicas. Como principal problema se erige el vandalismo, y la falta de un mayor cuidado, que han hecho mella en el paraje.
Que la mano del hombre ha sido la culpable de gran parte de las deficiencias, es más que evidente. En el lugar se han instalado varias mesas y asadores de piedra para que los vecinos puedan disfrutar de una churrascada a los pies de la playa. Sin embargo, varios bancos ya han sido arrancados de cuajo y robados, obligando a la gente a llevar sus propias sillas de casa.
Los objetos de madera se han librado de los amigos de lo ajeno, aunque no de la lluvia, el viento y la salitre, que han descorchado y gastado las capas de pintura. Destaca también lo que ocurre con las mesas de este material, que, al no estar ancladas al suelo, los usuarios aprovechan para moverlas a su gusto. Por ejemplo, una se encontraba pegada en un muro de cemento, lo que no ayuda a su conservación.
Divertimento
Aunque hay un exceso de juegos para los más pequeños, el parque de A Corna tiene otros atractivos a explotar, como la cercanía de la playa. El Concello de Ribera ha instalado un pequeño cerco de madera, en el que hay varios balancines. Sin embargo, estos se encuentran en un mal estado de conservación. Un tobogán, en el que también se evidencia la falta de una mano de pintura, tiene además una barra partida, lo que podría ser un peligro para los críos.
Fuentes del Concello de Ribeira reconocieron que este lugar de Palmeira es una de sus prioridades, aunque la gran cantidad de parques como este impide que se puedan reparar las deficiencias con la diligencia con la que les gustaría. Como pasos a seguir, afirmaron que los miembros del taller de empleo podrían ser los primeros en pasar por ahí para dar una mano de pintura y arreglar algunos de los objetos. Si es necesario, con la mayor celeridad posible, la brigada de obras acudirá al recinto para comprobar el estado del mobiliario.
Los ladrones se han llevado varios bancos de piedra, que fueron arrancados de cuajo