Además de repartir trampas, apicultores y miembros de Protección Civil explican a los vecinos cómo elaborar dispositivos caseros. El rianxeiro Roberto Carlos Iglesias dice que lo esencial es preparar un líquido que tenga agua, algo dulce y alcohol para atraer a las reinas.
El recipiente. Puede hacerse una trampa con una botella de litro y medio de agua. A esta deben realizársele dos o tres agujeros pequeños a los lados, así como otro en la parte superior. Después debe colgarse de un árbol, a metro y medio o dos metros del suelo.
El atrayente. Lo importante en esta época del año es coger a las reinas para que no hagan nidos. Uno de los líquidos atrayentes puede prepararse con un litro de zumo de arándanos, medio litro de vino blanco, cuatro cucharadas soperas de vinagre y un par de gotas de lavavajillas. Con esta medida pueden hacerse entre cuatro y cinco trampas. Otro más sencillo consiste en emplear agua caliente, miel y vinagre, a lo que también puede añadirse caña u otro alcohol similar.
Preservar a las abejas. Los apicultores y miembros de Protección Civil consultados explicaron que las reinas se sienten atraídas por lo dulce, especialmente en esta época del año. En cuanto al hecho de que se eche alcohol o vinagre de vino, comentan que se debe a que, de esta forma, no acuden las abejas a las trampas. Lo que se consigue es que las reinas de velutina caigan dentro del recipiente y acaben ahogadas.