Una franja importante del territorio sonense está sometida a las directrices de la Rede Natura. Se trata de un espacio que, precisamente, ejerce una gran capacidad de atracción y favorece la llegada de numerosos visitantes. El Concello cree que eso puede constituir una fuente de dinamización empresarial y, precisamente, lo que busca es compaginar la preservación con el aprovechamiento económico.
Para conseguirlo, el gobierno ya mantuvo un primer encuentro con responsables de Medio Ambiente y la intención es que este mes tenga lugar otra reunión para definir el marco de actuación, que podría extenderse a otros municipios.
Por su parte, el mandatario rianxeiro, Adolfo Muíños, explica que la zona protegida corresponde al último tramo de río Ulla. La intención del Ayuntamiento es acometer próximamente una intervención que permita su puesta en valor.
En concreto, la obra consistiría en mejorar el acceso e integrar este espacio en una red de paseos que vaya desde el puerto de Rianxo y hasta Dodro.