La bolsa y el gen español

Álvaro Sevilla Gómez
Álvaro Sevilla SEÑORÍO Y VALORS

BARBANZA

Altea Tejido | EFE

«En ese arrebato tan yanqui de «hazte rico en tres pasos» completé un curso titulado ¿Cuándo empezar a invertir en bolsa?»

24 ene 2022 . Actualizado a las 11:00 h.

En ese arrebato tan yanqui de «hazte rico en tres pasos» completé un curso titulado ¿Cuándo empezar a invertir en bolsa?. Lo imparte con mucha guasa Miguel Ángel López Mendo —está en Udemy por cuatro duros— y, por suerte, me libré de recibir una de esas recetas de crecepelo que tanto abundan en Internet junto a criptomonedas, metaversos, acciones de Amazon «que te darán un sobresueldo» e influencers.

En realidad no descubrí como hacerme multimillonario, pero sí cómo funcionan, más o menos, los ciclos económicos: sus momentos alcistas, de endeudamiento, las fases líquidas, las crisis periódicas... La clave para aprovecharlos era la de tener siempre la escopeta cargada, huir de las apuestas «seguras» y contar con liquidez para comprar cuando todos venden. Comprar gangas y deshacerte de ellas cuando suben. Cuando «la sangre corre por las calles» y la economía muere, ese era el momento idóneo para entrar en bolsa con todo.

Sigo sin ser millonario, pero gané la visión de López Mendo sobre las idiosincrasias de los países. Explica que para invertir es necesario conocer cómo actúa cada país ante una crisis. En Inglaterra, Estados Unidos o Alemania, rápido, de forma contundente, para tratar de remontar lo más rápido posible. En España, explica, se improvisa, se deja que el tiempo corra hasta que las cosas están tan mal que ya no hay otra opción que meterle mano. Destacaba una cosa más. Que cuando tomábamos medidas, lo hacíamos tan bien como cualquiera. O incluso mejor. En esta sexta ola, con casi toda la población vacunada y sin dramas en las ucis, me ha quedado más que claro.