Las mejores rutas para pedalear por carretera en Barbanza

mireia garcía

BARBANZA

MARCOS CREO

Kilómetros de asfalto que ascienden a los picos más altos de la sierra y bordean la costa

30 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

El ciclismo de carretera gana tirón entre los amantes del deporte. Los caminos poco transitados de Barbanza que suben hasta los montes más altos, como Iroite o A Curota, hacen que cada vez más personas se animen a descubrir la comarca sobre dos ruedas. Por ello, aquí van una serie de propuestas para aficionados que quieran empezar o continuar haciendo ejercicio mientras respiran el aire puro, escuchan el sonido del oleaje del mar o contemplan el paisaje de los municipios de la comarca.

Rianxo

Hasta Bealo, desde la playa. El trayecto idóneo para todo aquel que quiera comenzar a pedalear por carretera tiene su punto de partida en la playa de A Torre, en Rianxo. Subiendo hasta el mirador de Castro Barbudo, el punto más elevado de la parroquia de Taragoña, y acabando en la aldea de Bealo, en Boiro, es una ruta de 20 kilómetros poco transitada por vehículos. Esto último hace de ella la opción perfecta para iniciarse en el ciclismo. 

corrubedo

Desde Ribeira hasta el faro.  Los amantes de la tranquilidad cuentan con la alternativa de pedalear hasta el faro de Corrubedo, partiendo desde el puerto ribeirense. Este recorrido de 50 km, donde predomina lo llano y escasean las pendientes, pasa por el puerto de Aguiño y permite contemplar la costa barbanzana hasta llegar al faro. Desde allí, las vistas son espectaculares y en verano puede verse una de las mejores puestas de sol de Galicia.

Vuelta Barbanza

La más popular. Los ciclistas que mejor conocen la comarca hablan de una ruta básica: la conocida como Vuelta Barbanza. El recorrido parte de Boiro, sube hasta la pequeña aldea de Moimenta y continúa en dirección Escarabote hasta llegar a Noia. El retorno se efectúa desde la localidad noiesa, pasando por Porto do Son y Portosín, hasta llegar al término de Ribeira. Comentan quienes la realizan que en dos horas y media o tres, los 60 kilómetros de pedaleo permiten contemplar la belleza del interior y de la costa mientras se ejercita el cuerpo y se despeja la mente. En invierno, este recorrido no suele tener excesivo tráfico, pero en verano es mejor evitar el tramo que discurre por Porto do Son porque el concello suele estar muy concurrido debido a la llegada de los veraneantes.

Noia

De Rianxo a Lousame. Los aficionados que llevan meses sobre las dos ruedas, pueden optar por esta ruta para coger ritmo y pasar al siguiente nivel. Desde Rianxo hasta Lousame, pasando por la ermita de San Ramón en dirección Portobravo. Este camino de casi 70 kilómetros es el más recomendado para practicar y dar el salto a itinerarios de mayor kilometraje y complejidad. Existe la posibilidad de realizarlo desde Ribeira, pero suele estar más transitado. 

3 picos

Iroite, Enxa y Curota. Dando el salto al ciclismo profesional, la Classic 3 Picos es la ruta más conocida entre los que llevan años practicándolo y consiste en el ascenso a los tres montes más importantes de la comarca. Partiendo de Ribeira o de Boiro, el primer punto señalizado en la Classic es el monte de A Curota, en el concello de A Pobra, de 596 metros de altitud. El viaje continúa hasta tierras sonenses, donde se llega al Enxa, de 539 metros. Después de dos duras etapas se concluye el circuito con la subida al pico más elevado de la sierra, de 685 metros: Iroite. Un total de 108 kilómetros que merece la pena hacer en bicicleta para respirar el aire puro de la sierra, observar las rías de Arousa y Muros-Noia desde lo más alto y hacer ejercicio al mismo tiempo, fortaleciendo no solo el físico, sino también la respiración.

Monte muralla

La más dura. Desde Boiro, se parte hacia el monte Muralla, cruzando por la aldea de Vilar. La primera fase del recorrido es llana y se realiza sin mucho esfuerzo. Pero, cuando empieza la cuesta arriba, los gemelos se agarrotan debido a la gran pendiente que caracteriza a esta montaña. En la cima está ubicado el famoso mirador del monte Muralla, donde se puede hacer una parada de descanso para beber y sacar una foto que recuerde el momento de la llegada. La bajada, según dicen, es muy cómoda, pero debe tenerse cuidado con los coches que suben para visitar el mirador. Por eso se recomienda hacerla entre semana y mejor por la mañana. El descenso continúa por Portosín, para subir al monte Enxa. La siguiente bajada es por la parte de Porto do Son, donde se sube a la Curota y se concluye yendo hacia el punto del que se parte.