Juan Ares humaniza y llena de olas el gran hospital Ribera Povisa de Vigo

María Xosé Blanco Giráldez
M. x. Blanco RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

El boirense rediseñó una superficie de 1.400 metros cuadrados del centro

15 mar 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Las nuevas tendencia de diseño e interiorismo no solo se extienden por edificios residenciales, comerciales y empresariales, sino que buscan también su hueco en los inmuebles de carácter sanitario, por la importancia que estos tienen para las personas. En ese contexto se enmarca el último gran proyecto desarrollado por el boirense Juan Ares en el mayor hospital privado de España, el Ribera Povisa vigués. El barbanzano dejó su huella en la renovación de las instalaciones, una actuación que ha supuesto una inversión de 2,5 millones de euros. Su misión ha consistido en humanizar el interior y aportarle una seña de identidad vinculada con la ciudad en la que se ubica, en forma de toque marinero.

A través de su estudio, Espacio Invisible, el boirense se ha encargado de la parte del diseño en una actuación que ha afectado principalmente a la entrada que tiene el edificio por la calle Salamanca, donde se han suprimido las antiguas escaleras, que suponían una importante barrera arquitectónica. En esa zona se ha habilitado un amplio vestíbulo, nuevos ascensores y un sistema de citas que detalla el itinerario a seguir para llegar a las diferentes consultas.

La intervención ha afectado a unos 1.400 metros cuadrados, distribuidos en dos plantas, en los que Juan Ares ha impregnado el estilo que lo caracteriza. «A miña proposta consistiu en aplicar en Povisa a nova tendencia que se está empregando nas edificacións sanitarias, que pasa por suavizar os interiores, evitando que sexan fríos e asépticos, e camiñar cara un interiorismo que dea a sensación de que os pacientes están entrando nun hotel», explicó el barbanzano.

Mar y versos

A la hora de elaborar su propuesta, Juan Ares también apostó por trasladar al interior del Povisa alguna de las señas de identidad del territorio en el que se encuentra ubicado el hospital y se decantó por el mar: «Proxectouse no interior a través de xeometrías ondulantes que proporcionan sensación de comodidade e benestar ao espazo». Y completó su obra con versos, en concreto, un poema de Martín Códax que está rotulado en una de las paredes de la sala de espera principal.

El diseñador boirense, que ha dejado su huella en otras importantes instalaciones de Galicia, como el mercado La Galiciana de Santiago o el centro comercial Vialia, cuyas estancias impregnó también con temáticas extraídas del ADN vigués, se mostró satisfecho con esta última intervención en un edificio de carácter sanitario: «Foi moi gratificante ver o cariño co que se tratou o espazo. Eu busquei crear un interior cómodo, agradable, estético... saír do común dos hospitais, que son lugares máis asépticos».

También desde Povisa destacaron que el afán por la humanización ha estado detrás de la importante intervención realizada: «No hemos querido dejar pasar la oportunidad de realizar un trabajo de interiorismo muy cuidado, para que los pacientes se sientan cómodos», subrayó el director de servicios generales, Alfonso Pimentel.