El comité de Servia convocará una huelga indefinida si no se atienden sus demandas

Marta Gómez Regenjo
Marta Gómez NOIA / LA VOZ

BARBANZA

CEDIDA

Los trabajadores reclaman una gerencia y un plan de viabilidad para la planta

16 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

El pasado mes de octubre, los trabajadores de la planta de Servia pararon. Era una medida de presión para hacerse oír, para advertir de que el futuro de la planta no está garantizado y de que urge tomar medidas y realizar inversiones si se quiere mantener el modelo de gestión de residuos de Serra do Barbanza. Sin embargo, desde entonces poco o nada ha cambiado, así que ahora han retomado las movilizaciones, y si siguen sin respuestas habrá hueva de nuevo, pero esta vez indefinida y en la peor época del año por el incremento del volumen de basura en los meses de verano.

Ayer tuvo lugar la primera de las dos manifestaciones anunciadas para esta semana. Desde el propio comité de empresa reconocen que era simbólica, puesto que al ser en un día laborable y en Carnota sabían que la participación no era demasiado elevado. Pero el Concello carnotano es el que ostenta la presidencia en este momento y querían dejar patente su malestar: «Os compromisos adquiridos non están no papel, non hai nin xerencia, nin plan de viabilidade nin un proxecto para adaptar a planta á nova lei de residuos».

Que se contrate un gerente para las instalaciones de Servia, que evite que todo el peso de gestión y administrativo recaiga en un presidente que rota anualmente, y que se presente un plan de viabilidad que garantice el futuro del complejo medioambiental y el sistema de gestión de residuos allí implantado son las reivindicaciones principales de los trabajos, que demanda además que se empiece a trabajar ya en unos nuevos pliegos para la concesión del servicio. El contrato actual finaliza en el 2023 «e levamos catro anos avisando do que ía pasar e non se fixo nada».

El comité es consciente de que es necesario prorrogar el contrato actual, pero consideran que la intención de la mancomunidad en hacerlo por cinco años, el plazo máximo, es un error: «Unha prórroga a cinco anos nas mesmas condicións non é viable, sen camións, sen contedores, cunha planta que cae a cachos...».

En este sentido, los representantes de la plantilla recalcan que las movilizaciones que están protagonizando ni son un capricho ni responden a demandas de mejoras salariales, sino que «o que estamos reclamando é un plan de viabilidade, saber cara onde imos, que nos dean estabilidade. Pedimos que nos garantan o futuro e que se invista na planta».

Falta de gestión

Hace tiempo que la volteadora de las instalaciones, necesaria para la separación de los residuos para su tratamiento, está estropeada y que los camiones están obsoletos mientras siguen acumulando kilómetros. Acusan a la mancomunidad de desidia y dejadez durante años para llegar a esta situación y piden un cambio.

Apuntan que los fondos de recuperación Next Generation serían una buena oportunidad para conseguir fondos para mejorar el complejo medioambiental, pero está perdida: «Nin sequera está feita a liquidación do ano anterior, sen iso non se pode optar a subvencións. Por iso é necesaria unha xerencia e persoal que se ocupe da xestión».

Esperarán a comprobar si la protesta de ayer y la que están convocada para el domingo surten algún efecto, y si no es así, irán a la huelga. Por lo pronto, los sindicatos representados en el comité han confirmado que asistirán a la reunión entre la concesionaria y la mancomunidad el próximo día 27: «Temos todo o dereito a estar, somos a representación dos traballadores e levamos anos movéndonos en todas as Administracións e petando en todas as portas pola viabilidade da planta».