Héctor Lorenzo: mano a mano con grandes nombres del deporte

Celia Riande García
Celia Riande RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MARCOS CREO

El boirense ha trabajado con conocidos profesionales como los futbolistas Jota Peleteiro o Raúl Albentosa

05 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Readaptador físico, licenciado en Ciencias del Deporte y diplomado en Magisterio, ha enfocado su carrera profesional a la preparación física y la recuperación de lesiones, habiendo trabajado con nombres como Jota Peleteiro o Raúl Albentosa. Sin embargo, Héctor Lorenzo Buceta, natural de Boiro, no se considera en absoluto un talento barbanzano. Lo que sí lo define, según sus propias palabras, es ser una persona «que disfruta de su profesión y que está muy agradecida por haber tenido tantas oportunidades de aprendizaje». Algo de lo que no cabe duda al estudiar su camino profesional.

Antes de haber comenzado su carrera, Héctor Lorenzo ya estaba vinculado al deporte, un nexo que, según él indica, tuvo mucho que ver con su hermano y su cuñado: «Me llevaban bastantes años y siempre les veía haciendo deporte. Fueron un ejemplo a seguir, ya que tenían un pequeño gimnasio montado en casa cuando era pequeño. También practicaba fútbol y juegos de todo tipo en la plaza del concello de Boiro con todos los vecinos. Todos los jóvenes tenemos muy buenos recuerdos de esa época».

Así comenzó una pasión por las actividades físicas que no daría tregua en su juventud, cuando además de centrarse en las Ciencias del Deporte, continuaría con deportes de contacto, fútbol, remo o trail. Pese a su implicación en varias actividades, Lorenzo lograría estar en el grupo de investigación Hi10 de la Universidade de Vigo, e impartiendo clases de Fisiología del Ejercicio hasta llegar a su primer gran rol.

«Mi primer proyecto profesional fue en el Club de Remo Rianxo, estuve cuatro temporadas. Allí era entrenador, remero, llevaba la gestión y hacía un poco de todo. Tenía claro que quería dedicarme a ese campo y, aunque fue muy sacrificado, aprendí muchísimo y fue una experiencia satisfactoria. Además, los resultados nos acompañaron, tenía a chicos muy comprometidos y ganamos tres campeonatos de España de batel en categoría cadete y juvenil», relata Héctor Lorenzo, a quien la vida le guardaba una gran oportunidad: «Me contactaron para empezar a trabajar con Jota Peleteiro a finales del 2013, en ese momento dejé el club y comencé una nueva etapa en el entrenamiento personalizado y en el ámbito de la readaptación y la gestión del rendimiento deportivo».

De este modo comenzaría Héctor Lorenzo su etapa de trabajo con deportistas de élite, entre los que también figuran nombres como el de Raúl Albentosa: «A raíz de esto me contactaron otros jugadores profesionales. El trabajo es mano a mano y es un mundo en el que hay una gran exigencia, tanto deportiva como mediática, que te hace aprender mucho».

Esta fase de aprendizaje se desarrolló entre España e Inglaterra, permitiéndole además viajar y ver formas de trabajo en países como Estados Unidos, Bulgaria o Dinamarca. Supuso un gran crecimiento para el profesional, que pronto se lanzaría a abrir su clínica de fisioterapia, readaptación y entrenamiento en Boiro.

Primera clínica

En el año 2016, abrió el centro Ecosport de Boiro, un paso muy reflexionado: «Estaba haciendo mi tesis sobre el rendimiento y los factores que influían en él, y lo llevaba a la práctica con jugadores. Cuando me volví a España quise abrir una clínica que englobase todas esas fases, desde las pruebas de valoración hasta la fisioterapia, que desde un posoperatorio hasta la reincorporación a la vida laboral se pudiese hacer todo en el mismo sitio».

Con esa implicación y compromiso con el proyecto, el boirense lograría el crecimiento de su negocio: «Empezamos poco a poco y fuimos creciendo. Tuvimos una primera ampliación en el 2017, otra en el 2018 y la última, en el 2020. Al principio éramos dos personas, mi socio y yo, y ahora somos diez en plantilla. Estoy muy orgulloso del equipo que hemos ido formado. Además, próximamente está previsto abrir un segundo centro en Ribeira».

Si bien está claro que nadie sabe lo que depara el futuro, Héctor Lorenzo tiene claro que quiere seguir trabajando en lo que él mismo denomina como su gran pasión: «Llevo en la recuperación de lesiones desde el 2008, cuando la readaptación era todavía un campo por explorar. Es un enfoque precioso, que abarca el trabajo con profesionales, aficionados, niños o mayores, que te lleva a conocer ampliamente el cuerpo humano y sus patologías sin dejar nunca de formarte y estudiar».