Heroína negra, MDMA marrón o cocaína rosa, estas son las nuevas variantes de drogas que empiezan a circular por Barbanza

Christopher Rodríguez
Christopher rodríguez RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Imagen de archivo cocaína rosa incautada por la Guardia Civil en Porto do Son.
Imagen de archivo cocaína rosa incautada por la Guardia Civil en Porto do Son. GUARDIA CIVIL

Las fuerzas del orden ponen el foco en el auge de las sustancias opiáceas en las calles

29 abr 2023 . Actualizado a las 13:38 h.

Que la droga es un problema enquistado en Barbanza quizás no sorprenda a nadie, pero es un hecho que preocupa, y mucho, a fuerzas del orden y vecinos de la comarca. Ante la gran presencia de sustancias estupefacientes en las calles y una demanda que no pisa el freno, los proveedores de drogas han comenzado a extender nuevas variantes de sustancias en sus principales puntos de venta.

Así lo constatan desde los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, asegurando que pese a que la comarca es conocida por contar con cocaína y otras sustancias de altísima pureza, se ha detectado la existencia de tendencias fuera de lo común en las calles. Una de ellas es la heroína negra, sustancia que llamó la atención de los agentes durante varias redadas llevadas a cabo en el área.

«Es una variante que era muy poco común verla en la zona. Normalmente la heroína tiene un color marrón claro o blanco, dependiendo de su pureza. La que encontramos se acercaba más al negro, tenía el tono de la tierra recién regada», afirma un policía destinado en Barbanza. Al parecer, esta variante del opiáceo es mucho más potente que la común, teniendo una textura semejante a la del alquitrán.

Asimismo, otra nuevo tipo de droga que ha llegado a Barbanza, al parecer también relacionada con la heroína, es el MDMA marrón. Conocedores de los bajos fondos confirman la presencia de esta variante en las calles, asegurando que es una mezcla de heroína con el MDMA habitual. «Se trata de una especie de speedball —cocaína mezclada con heroína—, algo que se puso de moda en las grandes urbes en los últimos años. Por desgracia la comarca siempre va adelantada en estas cosas, sin drogas Barbanza sería una balsa de aceite con mucha menos delincuencia», sentencia un agente del instituto armado.

Las cuatro más comunes

Contando con que las posibilidades se multiplican dentro de cada tipo de sustancia, Policía y Guardia Civil comparten preocupación alrededor de los cuatro estupefacientes más consumidos en el área: cocaína —que incluso ha llegado detectarse de color rosa en algún operativo—, heroína, cannabis y hachís. Desde los destacamentos policiales con influencia en la comarca destacan que la mayoría de las actas llevadas a cabo tienen que ver con dichas sustancias. «Las que menos nos encontramos son algunas como el LSD o derivados del éxtasis, estos últimos casi siempre en forma de líquido», afirman fuentes de la Policía Nacional.

Aún así, los mayores quebraderos de cabeza giran sobre todo en torno a la heroína. La sustancia, que cobró protagonismo en la ría de Arousa a partir de los años 80, ha ido evolucionando al igual que su consumo, que ahora se realiza fumándola en una pipa. Pese a esto, las jeringuillas no están en desuso y, por desgracia, esto se demuestra con el hallazgo de estos utensilios en zonas transitadas de la comarca.

Por ejemplo, en A Pobra, vecinos denuncian que comienza a ser habitual encontrárselas en las inmediaciones del parque de O Castelo, principalmente en los alrededores de los baños públicos. Allí, aseguran, los drogodependientes de la zona acuden a consumir y a trapichear con dicha sustancia.

Desde las fuerzas del orden explican que este auge está relacionado con las grandes cantidades de droga que circulan por las calles, algo que influye directamente en la disminución de su precio: «En muchos casos vemos como la gente le ha perdido el miedo a las drogas. Antes se le tenía mucho más respeto, pero ahora hasta se ve como una fuente de ingresos factible. Es un peligro para la salud y para la vida en general».

El SUP reclama la creación en Ribeira de un equipo para luchar contra el narcotráfico

Aunque gran parte de la sociedad está implicada en la cruzada contra la droga, lo cierto es que los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado constituyen uno de los principales actores en esta lucha. Por esto y con el objetivo de mejorar la labor que se lleva a cabo en Ribeira, desde el Sindicato Unificado de Policía (SUP) solicitan la creación de un equipo específico para enfrentarse a esta lacra.

«Las labores de investigación se ven limitadas al no disponer de un colectivo que se dedique en exclusiva a enfrentarse al tráfico de estupefacientes. La Policía Judicial no solo se centra en las drogas, sino que también atienden fraudes, robos, delitos informáticos...», señalan.

Además, desde el sindicato continúan reclamando un aumento de personal, así como un incremento del catálogo de agentes para equipararse con otras ciudades como Vilagarcía. La capital de Arousa, por ejemplo, dispone de 80 plazas de agentes de Policía Nacional.

Miedo

Si hubiera cifras tangibles de la cantidad de dinero que mueve el tráfico de estupefacientes en la comarca, más de uno se llevaría las manos a la cabeza, y con razón. Por desgracia, las hay de todos los colores y tipologías, pero al final todas conducen al mismo destino. La perdición a la que las drogas están llevando a la sociedad abruma, incluso habiendo precedentes en la historia. A este paso, el trauma de la generación perdida se va a quedar en una mera anécdota al lado de lo que se viene, y eso da miedo.