Diogo Moreira y Solla apadrinan la gama de Frinsa para deportistas

Uno de los expositores que no falla nunca en el Salón Gourmets de Madrid es el de la conservera Frinsa, que en su comparecencia suele contar con la participación de su chef de cabecera y todo un estrella Michelín como es Pepe Solla. En esta edición no falló ni la empresa ni el cocinero y se incorporó un tercero, dando así mucho mayor atractivo al estand. Se trata de Diogo Moreira, piloto brasileño de Moto3 que actualmente es segundo en el mundial y tiene muchas posibilidades de hacerse con el entorchado. Que formara parte del tándem de estrellas de Frinsa no fue casualidad, ya que esta patrocina al equipo MTHelmets-MSi del que forma parte. En esta ocasión, la firma ribeirense quiso promocionar en el escaparate europeo de los alimentos y bebidas de calidad la gama de conservas para deportistas, caracterizadas por su aporte de proteínas, y, de paso, refrescar los paladares de quienes se acercaron al expositor con tres recetas, aparentemente sencillas, dos de ellas con sus conservas tradicionales de máxima calidad.

El estand de Frinsa es espectacular, probablemente el decorado con más gusto, comodidad y lujo de detalles, y destaca también por su aparente operatividad, con un espacio frontal para la realización de degustaciones y actividades, y uno posterior, más recogido y reservado. Es uno de los primeros que se encuentra el visitante cuando accede al Salón Gourmets por la puerta principal. Este año, el montaje fue mejorado todavía más, y en una de sus esquinas del frente del expositor llamaba la atención una moto KTM, la que pilota Diogo Moreira.

Conversación

Con el estand ambientado para ello, Frinsa organizó un showcooking con el gran Pepe Solla de maestro de ceremonias, y un divertido Diogo Moreira como alumno, que demostró ser aventajado. Previamente, entre ambos se desarrolló un diálogo en el que Solla preguntó al piloto si sentía la presión al estar tan bien situado para ganar el Mundial de Moto3, y este le respondió que no, porque está haciendo el deporte que le gusta y tiene que disfrutarlo, añadió además que tiene que ir carrera a carrera para llegar al objetivo. El motociclista aseguró que los circuitos que más le gustan son los de Austin y Monticello, y el que menos, el de Países Bajos.

Por otra parte, confesó que se entrena todos los días, y tanto en estas sesiones como cuando compite, a veces le queda poco tiempo para reponer fuerzas, de ahí que destacara la importancia de contar con conservas de la gama para deportistas que elabora Frinsa, firma que ha sacado un estuche personalizado con la imagen de Diogo Moreira y que presentó en el mismo salón.

Pepe Solla y Diogo Moreira hicieron público un compromiso de intercambio de papeles entre ambos en aquello en lo que son contrastados expertos: el chef enseñaba al piloto algunos secretos de la cocina, y el motociclista se comprometía a facilitarle el acceso a un circuito, no a enseñarle a conducir una motocicleta, porque el pontevedrés aseguró al principio de la conversación que tenía moto desde que era un niño y que es un apasionado de este vehículo.

Por su parte, Pepe Solla confesó que su objetivo diario es buscar el placer de sus clientes, en lo que se esfuerza con excelentes resultados, teniendo en cuenta que acumula estrellas Michelín y soles Repsol.

Tan pronto finalizó el intercambio de impresiones sobre un gurú de la alta cocina y un prometedor piloto de motociclismo que apunta a estar muchas temporadas en el candelero y que dejó claro que lleva en España muchos años porque habla perfectamente castellano, empezó la parte culinaria en la que Solla explicó que iban a elaborar tres sencillas recetas a base de conservas, labor en la que Diogo Moreira hizo las veces de aprendiz.

En primer lugar, prepararon un ajoblanco de anacardos y mejillones escabechados, que Solla fue explicando a su alumno como hacerlo paso a paso. Una vez concluida la demostración, los asistentes tuvieron ocasión de probarlo, lo mismo que ocurrió con el segundo, que consistió en sope de aguacate y ventresca. El tercero y último fue un gazpachuelo de guisantes y salmón. Se trató de una degustación de muchos quilates, con lo mejor de las conservas tradicionales de Frinsa, como son sus mejillones en escabeche y la ventresca de bonito, y una de las distintas opciones de la gama para deportistas.

La gama de conservas de proteína natural fue destacada entre las principales innovaciones del salón

En el transcurso del acto, el propio Solla explicó que la gama de conservas para deportistas cuenta con cinco opciones distintas, algunas de las cuales se salen de lo habitual en una empresa que procesa productos ligados al mar, con la marca Frinsa Proteína Natural, a base de atún, pavo, salmón, merluza y pollo.

Del acierto de la apuesta de Frinsa pudieron dar fe tanto los asistentes al entretenido showcooking como la propia organización del Salón Gourmets, ya que reconoció la gama de proteína natural como una de las innovaciones más destacadas de la edición.