La coincidencia de los temporales y la pleamar provocaron que muchos arenales quedasen totalmente sumergidos
30 oct 2023 . Actualizado a las 05:00 h.El cóctel servido este fin de semana entre el tren de borrascas y las mareas vivas provocó que el mar engullese literalmente gran parte de los arenales de la comarca de Barbanza, algunos de los cuales quedaron totalmente sumergidos. Esto fue lo que ocurrió en Os Areos en A Pobra, donde el agua llegó a golpear el muro situado al lado de la rampa —frente a la plaza de abastos—, una zona que normalmente era el único oasis de arena que se libraba de las embestidas del océano cuando se producen grandes pleamares.
En Barraña y Carragueiros las olas subieron muchísimos metros más de lo normal, reduciendo las playas a pequeñas lenguas de arena. También en los concellos más al norte vivieron episodios similares, como en Carnota o Muros, y es que nadie se libró de esta crecida inusual del mar. De hecho, no solo los arenales quedaron sumergidos, sino que en muchas zonas hubo peligro de que hubiese desbordamientos, como en Noia o en los puertos de Ribeira, Corrubedo o Aguiño.
En otoño y primavera es cuando normalmente se producen las mareas más vivas de todo el año porque coincide con la alineación de la Luna, el Sol y la Tierra. Es entonces cuando puede llegar a haber hasta siete u otro metros de diferencia con respecto a una pleamar o bajamar normal. Si a esto le añadimos que los grandes aguaceros se produjeron casi siempre cuando el agua estaba más arriba, esto explicaría que el paisaje de muchas playas se quedase sin arena estos días.
Además, el calentamiento global provocado por el cambio climático también tiene mucho que ver con esta subida excesiva del agua en las playas de la comarca, y de toda Galicia en general.