«Sé que muchos hombres estáis cansados de esta economía de Netflix, plástico y nada»
26 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Compruebo triste lo poco que me respeta Youtube al sugerirme vídeos de gurús de la masculinidad como Andrew Tate o Llados. Estos machos alfalfa me parecen unos majaderos. Su público son niños de cualquier edad, a los que ofrecen patrañas envueltas en estoicismo de garrafón para obtener lo que creen desear: Ferraris, pasta y un harén de mujeres. Azuzan la codicia y la lujuria, las bajas pasiones de los hombres minúsculos.
Sé que muchos hombres estáis cansados de esta economía de Netflix, plástico y nada. Sé que detrás de la fachada ridícula que nos cubre el pecho aún navegan viejos barcos de honor, caballerosidad, nobleza de espíritu, altruismo y deber. Por eso aún nos emociona el Nessun dorma, el David de Miguel Ángel, el aroma a salitre en un acantilado… La belleza nos recuerda que somos más que carne, que anhelamos un sentido, por eso la posmodernidad la detesta.
No tengas sueños de consumidor, ten sueños de hombre. No fantasees con cochazos y drogas en Ibiza. Hay algo más, algo mejor dentro de ti. Tu familia y tú en un pequeño hogar, muchos libros, un hacha. Ayer oí un sonido raro, dice tu mujer. No te preocupes, contestas. Un oso negro como un abismo quebrando la puerta. Sales por la ventana con el hacha, tu mujer y tu hija escapan por la ventana opuesta, hacia el pueblo. Gritas al oso, él es la suma de todas las cabronadas que te han pasado.
Vas a morir y no importa. Feliz, salvando a tu familia. Y te vas a llevar contigo un oso negro como un abismo. Quédate con tu cripto y tu plan para ser millonario, lo mío es luchar contra osos y abismos.