El Concello de A Pobra pretende adquirir la torre de Xunqueiras para destinarla a fines culturales
BARBANZA
El proyecto para abrir el edificio a la ciudadanía cuenta con el respaldo del delegado del Gobierno
27 sep 2024 . Actualizado a las 12:53 h.Es uno de los edificios más emblemáticos de A Pobra, y el Concello quiere adquirirlo para abrirlo a la ciudadanía y que vecinos y visitantes conozcan todos los recovecos del pazo de Xunqueiras. El alcalde, José Carlos Vidal, y la concejala de Cultura, Patricia Lojo, presentaron su propuesta al delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, que se mostró muy interesado en respaldar la iniciativa. De hecho, se comprometió a trasladar a los responsables del Ministerio de Cultura los planes del gobierno local para la adquisición del inmueble y su puesta a disposición pública en vista a una futura gestión cultural.
«Trátase dunha iniciativa capaz de conectar aos barbanceses cunha das súas máis importantes construcións, testemuña de toda a súa historia e xoia da arquitectura galega», apuntó el representante del Gobierno central. Pedro Blanco recordó que el ejecutivo de Pedro Sánchez lleva destinados más de 150 millones de euros a la defensa del patrimonio gallego, sobre todo en la conservación de bienes de interés cultural y paradores históricos-
El ambicioso proyecto que baraja el Concello de A Pobra para la torre de Xunqueiras es convertido en una residencia creativa, un centro de interpretación del territorio, un laboratorio cultural, así como en un gran huerto de recuperación de variedades autóctonas de la comarca.
Colección de arte
La torre de Xunqueiras se construyó en el siglo XIII, pero las revueltas Irmandiñas provocaron que perdiera parte de sus instalaciones originales, conservando únicamente la torre. A la largo de los años fue reconstruida y se le fueron añadiendo nuevas construcciones anexas de estilos que van desde el renacimiento al barroco. Fue declarado monumento de interés nacional histórico-turístico y alberga una de las colecciones de arte más importantes de la zona.
Estuvo en manos de distintas familias de la nobleza, y escritores como Victoriano García Martí o Valle-Inclán eran invitados frecuentes en las tertulias y actos que se celebraban allí. De hecho, se cree que el famoso marqués de Bradomín está inspirado en uno de sus propietarios.
A pesar de ser un edificio histórico, su estado de conservación es muy bueno, y desde hace años parte de sus instalaciones, sobre todo su jardín, se dedican al sector de la restauración.