La Guardia Civil investiga si se trata de una venezolana cuya desaparición fue denunciada el 29 de diciembre en Portugal
06 ene 2025 . Actualizado a las 19:37 h.Trágico hallazgo en Porto do Son durante el día de Reyes. El cadáver de una mujer apareció en la playa de A Arnela arrastrado por la corriente. El cuerpo fue hallado por unos viandantes que transitaban por el arenal y que dieron la voz de alarma cerca de las 13.50 horas. Pese a que la fallecida no llevaba ninguna documentación consigo, la Guardia Civil investiga si se trata de una ciudadana venezolana cuya desaparición fue denunciada el 29 de diciembre en Esposende, localidad situada al norte de Portugal.
La mujer muerta hallada en Porto do Son, de unos 50 años y con rasgos sudamericanos, presentaba claros síntomas de haber pasado varias jornadas a la deriva en el océano. Tenía el rostro desfigurado y las extremidades hinchadas, así como distintas magulladuras. En una primera inspección no se apreciaron signos de violencia.
Una vez se tuvo noticia de la aparición, hasta el lugar acudieron una patrulla de la Guardia Civil de Padrón y el 061, que atendió de un ataque de nervios a una de las personas que dio el aviso.
Posteriormente se desplazaron hasta el arenal la Policía Judicial de Santiago de Compostela, el forense y la autoridad del juzgado, que ordenó el levantamiento del cadáver. La autopsia tendrá lugar a lo largo del martes en las instalaciones del tanatorio de Boqueixón, en donde se esclarecerán las circunstancias de la muerte y se contrastarán los datos genéticos de la mujer para dar con su identidad. El hallazgo generó una gran sorpresa entre las autoridades del municipio sonense, ya que ni en la zona ni en el resto de Galicia constaban desapariciones que pudiesen encajar con lo encontrado en la playa.
La ropa, fundamental
Pese a las dificultades, la principal línea de investigación de la Guardia Civil es que el cuerpo pertenece a una venezolana que se encuentra en paradero desconocido desde el pasado 29 de diciembre en el distrito portugués de Braga. Entre otros aspectos, además de la complexión física y de los rasgos, para sostener esta hipótesis los agentes se basan en la ropa.
La mujer fallecida encontrada en Porto do Son iba ataviada con unas mallas negras, unos pantalones vaqueros cortos y unas zapatillas blancas. El torso lo tenía desnudo, presuntamente por la acción del oleaje a lo largo de varias jornadas.
En cuanto a la desaparecida en el país luso, las últimas noticias sobre ella se tuvieron en Esposende. El día en el que se le perdió la pista llevaba puesto unos vaqueros cortos y unas mallas negras, así como un abrigo y una camiseta del mismo color. En cuanto al calzado, vestía unas deportivas blancas. En la denuncia también se relató que la mujer lucía un bolso. Algunas informaciones la situaron en Viana do Castelo días después, aunque este extremo está sin confirmar.