Las llamas comenzaron a las siete de la tarde y se propagaron con rapidez
02 nov 2020 . Actualizado a las 10:58 h.Hacía poco más de una hora que Jorge Matosián, encargado del restaurante Miramar Playa de Boiro, cerrara el negocio cuando lo avisaron de que acababa de saltar la alarma de seguridad. Lo que no se esperaba es que un incendio fuera la causa de esta alerta, y mucho menos que las llamas arrasaran en dos horas un establecimiento en el que lleva trabajando más de 12 años.
«Es que no me explico lo que pudo pasar, llevo mucho tiempo allí y todo estaba bien cuando me marché», explicaba el boirense, que ayer todavía no daba crédito a lo que había sucedido. También trataba de digerir esta amarga noticia la familia Santamaría, propietaria de estas instalaciones y del Hostal Miramar que se encuentra justo en frente, y que ayer estaba destrozada por la pérdida de este local.
Eran las siete de la tarde cuando los bomberos de Boiro y Ribeira, así como los miembros del servicio de emergencias municipal, la Guardia Civil y la Policía Local, recibieron el aviso de que había un fuego en este restaurante de O Saltiño, situado a los pies de la playa de Barraña y al lado de la carretera que conduce a Cabo de Cruz. Cuando llegaron los equipos contraincendios, las llamas ya devoraban todo el establecimiento, que estaba construido en su mayor parte en madera, lo que propició que se extendieran con gran rapidez. A pesar de que se intensificaron las labores para intentar controlar el fuego, este arrasó con todo el local, que quedó reducido a escombros. Sobre las nueve de la noche se daba por controlado el incendio, aunque los bomberos tuvieron que continuar más tiempo refrescando toda la zona porque todavía quedaban algunos puntos calientes que podrían reavivarse.
A pesar de que será una investigación la que determine el origen de las llamas, no se descarta que se produjeran a consecuencia de un cortocircuito en un aparato eléctrico. Está previsto que hoy se pueda inspeccionar lo que queda del local para poder determinar el posible foco, pero lo que ya se da por hecho es que habrá que derruir lo poco que todavía sigue en pie del restaurante Miramar Playa.