Velo presenta su renuncia y pone fin a 38 años en la política municipal de Boiro

Manuel Velo se va. Después de 38 años en los que fue alcalde y concejal, ha presentado su renuncia y deja la política activa boirense. Se aparta al no haber logrado su objetivo de conseguir un pacto de gobierno entre todos los partidos (PSOE, BNG, IC Boiro y Boiro Novo) que en junio del 2019 apoyaron el nombramiento del socialista José Ramón Romero, Martiño, como alcalde del municipio. «Desde o principio insistín en que cinco concelleiros do PSOE con 12 na oposición sería imposible facer o cambio que Boiro necesita», apunta el veterano edil, que recuerda que el pasado agosto ya hizo pública la necesidad de alcanzar este acuerdo político, y daba de plazo tres semanas: «Van 24 e sen resultados».

Denuncia que en todos estos meses no se ha convocado ni una sola reunión entre estas cuatro fuerzas políticas para poder llevar a cabo proyectos importantes, «tal e como fixeron alcaldes de Ribeira, Rianxo e A Pobra que pactaron coa oposición. En Boiro, os socialistas son a segunda forza e non pactan con ninguén. Na historia democrática deste concello nunca cinco concelleiros se quedaron con todas as competencias», apunta Velo.

La consecuencia directa de ser tan pocas personas en el equipo de gobierno es que, a juicio del ex regidor, crea una parálisis total de la actividad municipal. «O alcalde non executa nin traslada nin xestiona os acordos dos plenos nos organismos correspondentes, como a moción de IC Boiro reclamando á Xunta a construción dunha residencia, ou dunha cooperativa de vivendas colaborativas para que os xubilados non teñen que emigrar fóra de Boiro», apunta.

Dotar de mayor seguridad vial a la calle Principal, la reparación del centro social de Cabo de Cruz y de la Casa del Mar, desarrollar nuevos planes urbanísticos o aprobar los presupuestos fueron otras de las propuestas que Velo propuso llevar a cabo, pero que el ejecutivo local no escuchó. Aunque sí tiene que reconocer que él estuvo detrás de algunos proyectos que se sacaron adelante, y cita: terrenos para nuevos aparcamientos, Radio Boiro, puesta en marcha del párking de A Negral, la reapertura del edificio de las Colonias o el acondicionamiento de los almacenes municipales de Espiñeira.

Mal funcionamiento

El hasta ahora portavoz de IC Boiro, que ha registrado su renuncia por vía telemática, recuerda que se ofreció personalmente a Martiño para ayudar en la organización de algunos departamentos del Concello para permitir que funcionaran con más agilidad, pero tampoco fue aceptada su propuesta. «Desde o principio ofrecinme incondicionalmente para ir co alcalde aos organismos que creo coñecer para traer subvencións para Boiro, pero nunca quixo», insiste Velo.

Todos estos motivos le han llevado a dejar su silla en el salón de plenos que ocupará José Antonio García Castro, y que podría derivar en una moción de censura de la que se lleva hablando varios meses, pero que parece que se ha enfriado. «Sempre loitei desde a política con honestidade por un Boiro progresista, democrático, transparente e xestionando na defensa de todos e sen privilexios», resume el veterano concejal, que agradece el apoyo de los votantes y de su familia en todos estos años.

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