Abarrote en el tributo a la banda de Mark Knopfler y en el concierto de Dios Ke Te Crew
08 jul 2024 . Actualizado a las 11:32 h.La música es la columna vertebral de las fiestas de Boiro de este año, y desde el Concello se quisieron tocar distintos palos para llegar a todos los públicos. Después del estreno del viernes con la Remember Fest, Lontreira y la orquesta Gran Parada, la noche del sábado prometía con el tributo a Dire Straits. La plaza de Galicia se llenó de seguidores de la banda de Mark Knopfler, además de un gran número de curiosos que querían ver cómo era el espectáculo que iba a poner sobre el escenario el grupo Alchemy Project.
«A praza se encheu e veu moita xente da comarca e de fóra. Foron máis de dúas horas de concerto e, aínda que eu xa os vira, impresionáronme», confesó la concejala de Cultura, María Outeiral, que destacó que los artistas se mostraron muy cercanos e incluso bajaron a saludar al público tras la actuación.
También los espectadores que asistieron al concierto de la banda Dios Ke Te Crew pudieron ver muy de cerca a los músicos, que regalaron a los asistentes un tema a dúo con Boyanka Kostova. El grupo de trap gallego de Santiago acudió a verlos y acabó subiéndose al escenario para interpretar el tema OG.
Tampoco podía faltar la música de orquesta, y fue Origen la encargada de amenizar la verbena, a la que se sumaron un buen número de jóvenes, según apuntó María Outeiral. «Ao ter tres escenarios con tres tipos de música distintos podemos chegar a máis público e penso que é un acerto», señaló la edila de Cultura boirense.
Tradicional y boleros
La jornada matinal del domingo también tuvo su ambientación musical, pero en este caso los sonidos tradicionales fueron los protagonistas con la actuación del grupo de baile de Abanqueiro y Abeloura. A la par, los integrantes de la banda de tambores portuguesa Treboada Baixo Minho caldearon el ambiente recorriendo las calles del municipio.
Los más mayores también tuvieron su momento especial, con un concierto de boleros que tuvo lugar en la plaza del Centro Social de la mano del grupo Trobeiros da Ponte, a los que siguieron los integrantes de A Misela. María Outeiral reconoció que esta actuación tenía un formato distinto, porque era para disfrutar sentado e iba dirigida a un público concreto. «O ano pasado funcionou moi ben, así que quixemos repetilo este», resaltó la concejala de Cultura.