Sanidade analiza la calidad del agua de un total de 89 puntos costeros en la comarca
29 mar 2021 . Actualizado a las 20:14 h.La pandemia ha puesto en evidencia la elevada dependencia que tiene del turismo la economía española, y aunque en Barbanza el enorme peso de sectores como la industria ha paliado en buena medida los efectos de la crisis derivada del covid, no puede negarse la importancia de la actividad turística en la comarca. El verano pasado, el alivio de las restricciones tras el confinamiento favoreció la llegada de visitantes a la zona, que tiene en sus espacios naturales y sus playas sus principales bazas para atraer veraneantes. Estas últimas son, además, garantía de calidad, tal y como refleja el informe anual de la Dirección Xeral de Saúde Pública, según el cual las zonas de baño barbanzanas rozan la excelencia.
De hecho, los arenales de Barbanza se quedan a muy poco de obtener el pleno de sobresalientes. Sanidade analiza la calidad del agua de un total de 89 playas de la zona, y en 87 los resultados de los exámenes son excelentes, lo que supone el 98 %. Pero además, las dos restantes superan con creces el aprobado al obtener una calificación buena.
El informe que realiza la dirección xeral establece cuatro niveles para clasificar la calidad de las aguas de baño: excelente, bueno, suficiente o insuficiente. En el conjunto de Galicia, el 98 % del medio millar de las playas analizadas se sitúa en los dos primeros escalafones, un porcentaje que en el caso de Barbanza se eleva hasta el 100 %, ya que ninguno de sus arenales obtiene el aprobado raspado.
En cuanto a las dos zonas de baño que no alcanzan el sobresalientes, se sitúan en Muros y en Carnota. El muradano es el municipio barbanzano con mayor número de playas analizadas, un total de 21, y de ellas 20 logran el excelente y una, la de O Cabo, se queda en el bien.
Por su parte, en Carnota son 11 los arenales que figuran en el censo que elabora Sanidade, y la playa de San Pedro es la única que no alcanza la nota máxima en los análisis sobre la calidad del agua.
Toma de muestras
La clasificación publicada hace unas semanas por la Dirección Xeral Saúde Pública se elabora a partir del análisis de las muestras tomadas en cada uno de los puntos que figuran en el censo entre el 1 de junio y el 30 de septiembre del año pasado.
En total, se realizan una decena de muestreos en cada playa, uno antes del inicio de la temporada estival y los nueve restantes hasta finales de septiembre, con una cadencia quincenal. Esto permite realizar un seguimiento de la situación bacteriológica de las zonas de baño.
Los concellos ponen a punto las zonas de baño para los festivos de Semana Santa
Aunque el cierre perimetral de Galicia no permitirá la llegada a Barbanza de personas procedentes de otras comunidades autónomas en los festivos de Semana Santa, los concellos se han puesto manos a la obra para tener los arenales preparados para recibir a visitantes de otros puntos de Galicia.
Los temporales del invierno habían arrastrado a los arenales gran cantidad de restos de sargazo, troncos y basura que concellos como el de Rianxo comenzaron a retirar la semana pasada. También en A Pobra se ha podido ver a operarios y maquinaria trabajando en las zonas de baño del municipio para dejarlas impolutas de cara a que vecinos y visitantes disfruten de ellas en las jornadas festivas, al igual que en Boiro. De hecho, la sábado por la tarde las tareas para la retirada de residuos causaron molestias a algunos usuarios que aprovecharon el soleado fin de semana para inaugurar la temporada de playa. Está previsto que los trabajos concluyan en las próximas jornadas, y desde el Concello también se ha informado de la implementación de medidas de vigilancia para garantizar la seguridad y que se cumplan las medidas anticovid en los festivos.
SÁLVORA
No solo turistas
No solo de los turistas vive la comarca, por eso es de agradecer que, aunque no vayan a venir visitantes en los próximos festivos debido a las restricciones por la pandemia, los concellos hagan un esfuerzo para que los de aquí también podamos aprovechar el buen tiempo en unas playas en condiciones.