El regidor apeló al diálogo y al trabajo conjunto de todas las fuerzas para sostener la acción de gobierno
18 jun 2023 . Actualizado a las 13:38 h.Julián Bustelo es ya el nuevo alcalde de Rianxo. Como estaba previsto por encabezar la lista más votada en las elecciones del 28M, el candidato de Rianxo en Común (ReC) recogió de manos del nacionalista Adolfo Muíños el bastón de mando en un salón de plenos lleno hasta los topes.
El ruido procedente de la casa consistorial que se escuchaba desde el exterior anticipaba que la de este sábado era una jornada importante. Después de 12 años de gobierno del BNG, un nuevo partido asumiría el bastón de mando y las quinielas apuntaban a ReC, que con cinco concejales -los mismos que PSOE y PP- gobernará en solitario los próximos cuatro años. La sesión siguió el procedimiento habitual y, tras constituirse la mesa de edad (se dio la circunstancia de que estaba formada por los dos concejales electos del BNG, Xusto Ordóñez y Sarela Betanzos) y la toma de posesión de las actas, los cabezas de lista de todas las listas presentaron su candidatura a la alcaldía. Cada cual votó a su partido y, ante el empate a cinco, Bustelo fue investido alcalde.
El regidor saliente, un Adolfo Muíños que se despidió del cargo y de la corporación con su habitual discreción, entregó el bastón de mando a su sucesor, quien en sus primeras palabras agradeció el apoyo recibido de los vecinos en las elecciones, un respaldo, dijo, que se suma «a unha enorme onda de ilusión que nos acompañou nos últimos meses e que nos levou a asumir hoxe a responsabilidade de gobernar Rianxo». Julián Bustelo aludió de nuevo al veredicto de las urnas para apelar a la unidad de todas las fuerzas políticas: «A veciñanza mandounos a todos unha mensaxe contundente: encomendounos facer do diálogo e do traballo conxunto unha ferramenta fundamental sobre a que soster a acción de goberno, unha tarefa que nós asuminos non só polo imperativo, senón tamén por convencemento».
Agradecimiento
«Facémonos cargo do presente para empezar a construír o futuro do noso pobo. Facémolo orgullosos polo traballo feito, tremendamente ilusionados e con humildade, conscientes de que estamos de paso e de que este bastón que hoxe recibimos antes ou despois llo entregaremos a quen decidan os veciños e veciñas», añadió el recién investido alcalde antes de dirigir unas palabras a su predecesor: «Quero agradecer a Adolfo a súa entrega estes 12 anos, máis dunha década de traballo ao servizo deste pobo exercido con honestidade, amabilidade e tolerancia, virtudes que soubo transmitir ás diferentes corporacións nestes anos».
Fortalecer la Administración local, buscar los medios para reforzar la gestión municipal y el correcto funcionamiento de los servicios, recuperar el dinamismo del municipio y garantizar el desarrollo industrial son algunos de los retos que el alcalde de Rianxo tiene por delante en los próximos cuatro años, en los que necesitará sumar apoyos con las demás fuerzas políticas para poder sacarlos adelante.
Antes de despedirse con un «viva Rianxo!», Julián Bustelo trazó la línea que seguirá en nuevo gobierno: «Para nós, a política é esa arte de coidar do común e de protexer os intereses das persoas traballadoras e dos máis vulnerarables».