Adiós a un vilagarciano de pro

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

RIBEIRA

JUAN MEAÑOS

Exprofesor, director del antiguo Calvo Sotelo y socio del colegio Galaxia de Ribeira, falleció en Vilagarcía a los 82 años

02 mar 2021 . Actualizado a las 19:24 h.

Hijo de un profesor represaliado, Jesús Garrido, a Daniel también le dio por la enseñanza, aunque en su caso en los institutos. Y extendió esa cada vez más extraña vocación que tienen los maestros de ayudar a los demás, porque no hay mayor ayuda que la enseñanza y porque el egoísmo avanza a pasos agigantados en esta sociedad, a la política.

Fue concejal durante varios mandatos. Con mando en plaza, ya que se encargó de Educación y de Cultura. En este último apartado le correspondió ser el presidente de la comisión de fiestas y quedó escaldado. Llegó a decir que habían sido los peores quince días de su vida. Y la verdad es que llevaba caña Daniel en las páginas de los periódicos en aquellos tiempos. Él solía encajar bien las críticas y luego se despachaba a gusto con alguna tribuna pública recordando sus tiempos de corresponsal de La Voz de Galicia en Ribeira, donde fue profesor de Geografía e Historia del colegio Galaxia. Allí estuvo hasta que en la década de los 70 del siglo pasado aprobó la oposición. Era uno de los socios del centro.

En una de esas etapas cíclicas que suele atravesar el PP decidió Daniel que ya era tiempo de dejar paso y se retiró discretamente a sus cuarteles de invierno. Su etapa como director del IES Calvo Sotelo (ahora Castro Alobre) también tuvo sus curvas y acabó de aquella manera, pero para hablar de la dificultad del empeño solo hace falta dar una cifra. El curso 1987-88 lo iniciaron 829 alumnos. Aquello era una miniciudad que no era nada fácil de dirigir.

La encuesta para las fiestas

Compatibilizaba sin problema ambos asuntos, la educación y la política, y de hecho a veces hasta los combinaba. Sucedió, por ejemplo, cuando ejerció de presidente de la comisión de fiestas. Al concejal Garrido Castromán se le ocurrió que la mejor forma de decidir el nombre de la actuación principal para los festejos de San Roque era preguntarle a los alumnos del director Garrido Castromán.

Y lo hizo, y explicó los resultados y la elección. El grupo ganador de aquella encuesta fue Loquillo y Los Trogloditas, pero su contratación fue imposible «porque pedían más de dos millones de pesetas», recordaba Garrido Castromán en La Voz. En segundo lugar quedó El Norte, que también se iba de presupuesto, y en tercero, Cómplices, descartado porque ya habían actuado el año anterior.

Así que se optó por el cuarto, Los Limones, cuyo caché en un principio era de 500.000 pesetas, pero luego se fue a las 800.000. «Aunque empezaron con media hora de retraso, los chicos estuvieron cantando durante dos horas y tengo constancia de que están muy contentos de haber tocado en Vilagarcía», resumió.

Daniel Garrido también fue escritor. Publicó varios libros con la historia de Vilagarcía como protagonista. Y poeta. Llegó incluso a escribir un himno a Vilagarcía que, como tantas cosas en las que él era el protagonista, también levantó cierto revuelo porque a ver quién se creía que era Daniel Garrido para arrogarse la potestad de escribir la letra del himno de Vilagarcía. Las últimas estrofas decían lo siguiente:

«Nos atopamos sempre gozosos/ no Edén feliz da fermosa ría/e estamos todos moi orgullosos/de ser os teus fillos, Vilagarcía. É de Galicia, Vilagarcía,/cidade ilustre, pobo de honor, /brillante perla da nosa ría, /terra de encanto, terra de amor».

Daniel amaba a su ciudad. La iglesia parroquial Santiago de Carril acogerá esta tarde (16.45) sus funerales. Sus familiares y amigos lo velan en la sala número cuatro del Tanatorio de Arosa.