La ironía protagoniza los versos que la mayor parte de las comparsas recitan durante su puesta en escena
26 feb 2001 . Actualizado a las 06:00 h.La animación callejera es una de las características del Carnaval. El sábado por la noche en los establecimientos de hostelería, y el domingo por la tarde en plazas y calles, los disfraces fueron los dueños y señores del fin de semana. Tres comparsas tomaron parte en el concurso organizado por el Concello de Corcubión, a pesar de que había cinco grupos inscritos. La primera clasificada, Clips de Play Móvil, estaba formada por 65 personas de siete a treinta años. Numerosas personas se congregaron en la plaza de Castelao para seguir el certamen y las curiosas letras de las coplas. No faltaron las críticas a la gestión municipal, las letras sobre las vacas locas, ni los comentarios sobre el nuevo look del concejal de Deportes, Xurxo Rodríguez. En Muxía, Don Quijote y el molino de viento se llevaron el primer premio de la categoría infantil en el concurso del domingo. En adultos vencieron Los tulipanes de Van Gogh y quedó segundo Fernando, el poeta, con sus coplas. Además, los niños invadieron ayer la Casa da Cultura para asistir a la representación de dos obras de teatro, un desfile y dos actuaciones musicales. Con música terminó también el certamen de disfraces que se celebró el domingo en Carballo, y en el que se congregaron centenares de personas. Disfraces individuales, en pareja, en grupo o en comparsa llenaron de colorido la plaza del Concello y las calles por las que realizaron el desfile. En Fisterra, el protagonismo dominical fue para los más pequeños después de la inauguración oficial del Antroido con el pregón de Manuel Suárez.