Reportaje | El faro que perdió su sirena El artilugio, que orientaba con sus sonidos a los marineros desde que fue instalado en el año 1881, ha dejado de cumplir su cometido
25 ago 2003 . Actualizado a las 07:00 h.Después de más de un siglo mugiendo, la vaca de Fisterra se ha quedado muda. La sirena instalada en el Faro sonaba durante los días de «borraxeira» para que los marineros tuvieran una referencia de tierra cuando la niebla no dejaba ver la luz. «Berra a vaca», decían en el puerto cuando el sistema instalado en el Faro se ponía a funcionar. En el mundo del GPS la sirena del Faro se iba quedando vieja. Pero todavía hay en el pueblo quien la echa de menos. Los primeros son los turistas, que tienen la esperanza de escuchar el extraño sonido cuando la niebla les impide disfrutar de las vistas desde el cabo, pero también los marineros y la gente del pueblo añoran un sonido con el que fueron creciendo. La vaca se quedó afónica y aquellos que salen de vez en cuando en su chalana a pescar por la zona, se quedaron sin su referencia durante los días de niebla espesa. Aunque la modernidad llegó a los barcos y hasta los bancos de peces aparecen en las carísimas pantallas de los pesqueros, las chalanas que disfrutan todavía los pescadores de más años tienen los mismos medios que hace diez siglos: un par de remos. Ellos sí echan de menos un ruido que temen no vuelva a reproducirse. Desde la Autoridad Portuaria de A Coruña, responsable de la señalización marítima de la provincia, aseguran que la vaca volverá a «berrar», aunque todavía no hay fecha para que esto ocurra. En A Coruña barajan la posibilidad de instalar un mecanismo nuevo si no ven viable reparar el viejo. Al fin y al cabo la vaca tenía ya muchos años y necesitaba un respiro. Pero medio año es más que suficiente y los marineros ya desean volver a escuchar los dulces mugidos que indican la tierra.