
El mirador | La esencia del sabor La Voz entregará mañana de forma gratuita una lata de colorante alimentario y pone fin a la colección de especias iniciada el pasado 8 de febrero
03 abr 2004 . Actualizado a las 07:00 h.El azafrán es, con mucha diferencia, la especia más cara del mundo. La flor que viste de oro los mejores platos de la cocina mediterránea y que, como tantas otras cosas, fue traído a Occidente por los árabes, que lo introdujeron en España ya en el siglo IX, es muy cara, a la fuerza. El azafrán se obtiene de los estigmas de los pistilos de una flor que ha de recogerse a mano; cada flor, de una planta emparentada con los lirios llamada Crocus sativum , tiene sólo tres estigmas. Y hacen falta más de 30.000 -o sea, 10.000 flores- para conseguir un cuarto de kilo de azafrán. Eso tiene un precio. Pero, afortunadamente, desde hace muchos años, los aficionados a la cocina tienen un sustituto perfecto: el colorante alimentario, que es una mezcla de harina de maíz, sal, tartrazina y amarillo anaranjado. Se trata de un aditivo utilizado par hacer más apetitosos y atractivos los alimentos al aportarle el característico color dorado de los países mediterráneos y es muy utilizado en sopas, arroces y todo tipo de guisos -la dosis recomendada es de una cucharada de producto para cada cuatro personas-. Los lectores de La Voz conseguirán mañana, de forma gratuita, una lata con una muestra de colorante alimentario, que pone fin a la colección de especias iniciada el pasado 8 de febrero.