Entroido por los cuatro costados

M.?Hermida / S.?G.

CARBALLO

15 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Carnaval, carnaval, carnaval te quiero... El fin de semana, por descontado, no tuvo otra sintonía (salvo la de las bocinas de los campos de fútbol) en las comarcas de Barbanza, Bergantiños, Soneira y Fisterra que no fuese la de esa mítica canción a que tantas veces puso voz el incombustible Georgie Dann. Tarde de murgas y comparsas, desfiles multitudinarios, pasacalles con carrozas... Todo tuvo cabida en un fin de semana en el que la lluvia prefirió no invitarse a la fiesta. Y aún lo QUE le queda: el martes va a ser un día grande en numerosas localidades, especialmente en Fisterra, donde se celebra el popular concurso.

En Barbanza, Ribeira fue la capital de las murgas y las comparsas. Ante un concurrido público, tuvo lugar el tradicional concurso en una cita en la que, por descontado, no faltaron las frases cargadas de eso tan gallego llamado retranca. Cantaron, por ejemplo, las amas de casa, que le echaron alguna que otra picada a sus seres queridos: «las amas de casa, también son abuelas para que trabajen sus hijos y nueras», decía la letra.

Mientras en Santa Uxía las sátiras hacían reír al respetable, en Taragoña (Rianxo) se lo pasaron de lo lindo en un desfile organizado por la peña Castro Barbudo. No faltó la música de charanga, ni los atuendos irreverentes. Horas antes, el sábado por la tarde, en Porto do Son también tuvo lugar un más que concurrido pase de disfraces. Los niños fueron los protagonistas de un certamen en el que se vio a dibujos animados como Bob Esponja.

Costa da Morte

En cuanto a la Costa da Morte, ayer se celebraron actos importantes en Carballo, Dumbría, Laxe, Muxía y Ponteceso, entre otros. En algunos, con más (muchos más) asistentes que otros. Por participación destacó, un año más, Carballo. El desfile del domingo, primero en las calles del centro y después en la plaza, es ya una cita consolidada. Conducido por David Amor, dicharachero y con estética muy de anuncio de agenda telefónica (el de los cinco números y pelucón), animó una cita multitudinaria, en la que participaron comparsas muy elaboradas que ayudaron a vencer el frío, ciertamente intenso.

También en Dumbría la participación fue muy elevada. Las dos carpa estuvieron a tope durante toda la tarde, y las cinco comparsas animaron a los espectadpres, llegados de toda la comarca. El entroido de Dumbría aún es joven, pero ya se ha convertido en un clásico. Lo mismo que el Caietano de Laxe, uqe ayer por la tarde dio su dicurso acompañado del alcalde (¿o fue al revés?).