El centro de salud carballés tramita entre 10 y 15 reclamaciones al día
14 ago 2012 . Actualizado a las 07:00 h.La entrada en vigor, el 1 de julio, del sistema de copago farmacéutico en Galicia ha provocado cientos de reclamaciones ante el Servicio Galego de Saúde (Sergas) por parte de pensionistas y jubilados de la Costa da Morte. Solo en el centro de salud carballés se contabilizan entre 10 y 15 quejas cada día.
Las protestas tienen que ver, en su mayoría, con discrepancias entre los ingresos anuales que obtiene el paciente y la cuantía mensual que le aplica Sanidade por dispensarle esos medicamentos. Un segundo grupo de reclamaciones las formulan usuarios que perciben una pensión no contributiva, y que, por tanto, están exentos del sistema de copago, pero a los cuales la Xunta de Galicia les estaría cobrando igualmente por las recetas.
El malestar entre los afectados por este decreto sanitario es más que evidente, apuntaron ayer dos farmacéuticas bergantiñanas. Primero, por la escasa información facilitada por la Consellería de Sanidade y la rapidez con la que se aprobó el Real Decreto-ley y, segundo, por el desconocimiento de los usuarios sobre el procedimiento a seguir a la hora de reclamar: «Desde la puesta en marcha del copago sanitario nos hemos convertido en una especie de oficinas de información, porque nadie les ha explicado a los afectados este nuevo modelo de financiación sanitaria», explica una profesional del sector.
Afectados
El Real Decreto-ley 16/2012, aprobado por el Gobierno en abril, y que en la comunidad gallega entró en vigor en julio, afecta a todos los pensionistas y jubilados gallegos, excepto a los que perciben una pensión no contributiva. Si el paciente obtiene unos ingresos anuales inferiores a los 18.000 euros paga como tope 8 euros al mes. Si sus ganancias oscilan entre los 18.000 y 100.000 euros al año abona 18 euros al mes, como máximo, por los fármacos, y si supera los 100.000 euros, paga el 60 % del importe del medicamento solicitado. La norma también afecta a los familiares que figuren en la misma tarjeta sanitaria del titular.
Reclamación
Para presentar la reclamación ante el Sergas, el usuario tiene que pedir la factura de las medicinas en la farmacia. Este justificante de pago se presenta posteriormente en el centro de salud y se tramita una reclamación argumentando las causas que motivan la queja.
Desde el Servicio Galego de Saúde reconocieron la existencia de «numerosas reclamaciones» en la Costa da Morte. Estas mismas fuentes también advierten de que la mayoría de las alegaciones «no van a ninguna parte», ya que los datos del usuario que aparecen en las tarjetas sanitarias están cotejados previamente con el Instituto Nacional de la Seguridad Social y con el las declaraciones de la renta del 2010.