Carracedo sigue sin lograr que el pleno se pronuncie sobre la obra en la AC-433

El alcalde de Laxe, Antón Carracedo, volvió a fracasar, y van dos veces en solo un mes, en su intento de que el pleno se pronuncie sobre las obras del vial que une esta villa con A Ponte do Porto. Los trabajos llevan más de dos años parados en un tramo de 330 metros, en Soesto, porque la calzada afecta al castro de Castrelo.

Fue, sin duda, el gran tema de debate este viernes por la noche. La corporación analizó un estudio efectuado por Applus Norcontrol, a petición de la Axencia Galega de Infraestruturas y remitido al Concello el 16 de octubre. En este documento, de 19 páginas, Infraestruturas defiende la construcción de una «ventana arqueolóxica» (un paso elevado) que salvaría gran parte de este yacimiento -aunque el regidor reconoció que afectaría «a un pequeno tramo do castro»-.

En el informe, los técnicos de Applus justifican la construcción de este puente por problemas de seguridad viaria en la zona. Según el documento, entre la construcción de un puente o bordear el castro por la antigua carretera supone reducir el índice de siniestralidad en el tráfico de un 81 a un 19 %. Además, hay un tercer elemento por el cual Infraestruturas avala la ventana arqueológica. En el cruce de Castrelo hay un nivel de peraltado inviable con la propuesta de circunvalar el yacimiento.

Esta alternativa fue defendida por el PSOE en el pleno. «Apoiámola por tres cuestións. A Primeira, está feita por técnicos da Xunta; segunda, é máis segura para os condutores e viandantes, e terceiro porque é necesario desbloquear o proxecto dunha vez por todas», argumentó Carracedo, quien explicó que la posible aprobación plenaria no era vinculante porque «ao final será Patrimonio quen decida o respecto».

Antón Carracedo criticó a la Xunta por la falta de compromiso con el yacimiento: «Os estudos din que é un dos máis importantes de Galicia, Dende o Concello pedíuselle a Patrimonio que evaluara e fixera un plan de conservación do mesmo e tanto nos orzamentos deste ano como nos que vén a Xunta non dedica un só euro á posta en valor o castro».

Sin embargo, la oposición, como ya ocurriera en el pleno del 11 de octubre, volvió a rechazar la propuesta planteada por los socialistas. «Queremos que sexa a Dirección Xeral de Patrimonio quen decida sobre este estudo da Axencia Galega de Infraestruturas. Nós apoiamos a protección total e absoluta do castro», apuntó el concejal del BNG, Xosé Manuel Pose.

Medidas de presión

Además, la corporación analizó el borrador de los últimos presupuestos de la Xunta, que «por quinto exercicio consecutivio segue sen dar un só euro a Laxe», dijo Carracedo, quedando en el cajón del olvido actuaciones pendientes, como la construcción del centro de día, la guardería o el saneamiento de Serantes. Sobre las medidas de presión a adoptar tampoco hubo un acuerdo unánime. Los ediles del PSOE y del BNG acordaron encerrarse en el consistorio en señal de protesta si antes del 31 de diciembre los cuatro portavoces no eran recibidos por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo. «Existe un acordo plenario unánime con data de novembro de 2011 no que se esixía á Xunta unha xuntanza cos voceiros dos catro grupos, e aínda estamos á espera», recordó el alcalde. Por su parte, el PP e IxLaxe descartaron la opción de encerrarse en el consistorio. Al final, los ediles decidieron que cada uno hiciese lo que estimase oportuno.

Por otra parte, el Concello de Laxe anunció un acuerdo con la cofradía para compartir el uso y los gastos de la casa del mar. Ambas entidades firmarán un convenio para el uso de las dependencias. El alcalde quiere aprovechar una de las plantas para habilitar dos viviendas sociales que podrían ser usadas por familias desahuciadas.

«Todos queremos o castro, pero entre o xacemento e salvar vidas eu quédome con salvar vidas»

Antón Carracedo

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