Xunta y Concello confirman que los vertederos cumplen la legislación
15 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El fuego declarado el martes en uno de los tres vertederos que hay en Areosa, el que gestiona la empresa Daorje, ha puesto en tela de juicio la seguridad de los depósitos controlados de residuos sólidos.
¿Son habituales los incendios?
Aunque el alcalde de Cerceda dejó caer en Radio Voz Bergantiños que el fuego podría haber sido provocado, los incendios son uno de los principales inconvenientes de los basureros, a causa de la formación de biogás. De hecho, los vertederos son una de las cinco mayores fuentes de emisión de metano (la ganadería es otra). La combustión es una de las principales reacciones de este gas que se forma a partir de la podredumbre de la materia orgánica, uno de los componentes más habituales en la basura doméstica.
¿Hay tomas de agua?
Los servicios de emergencia que participaron en la extinción del fuego en el vertedero de Areosa se quejaron de que no hay tomas de agua para apagar el fuego, pero el presidente de Sogama, Luis Lamas, recordó que los incendios en los basureros se sofocan con tierra y arena.
¿Quién controla?
La vigilancia de los vertederos de Areosa es muy frecuente, según confirmaron fuentes de la Consellería de Medio Ambiente. La realiza Calidade Ambiental, que tiene prevista una en los próximos días, para comprobar el estado de las instalaciones. Según la legislación española, las competencias están repartidas entre la Xunta y el Concello correspondientes. El de Cerceda tiene un técnico medioambiental, Ángel Loureiro, que ayer confirmó que la documentación está en regla y que hay controles y análisis de lixiviados continuos. Los tres depósitos (el de Sogama y los dos privados) tienen las correspondientes licencias y las autorizaciones necesarias para el depósito de distintos tipos de residuos (no peligrosos). Hace tres años Augas paralizó las obras basurero de la empresa Recoge Galicia de Gestión porque tapó un arroyo con cascotes. El BNG presentó una denuncia.
¿Son complicadas las obras?
La adecuación de un terreno para que acoja un vertedero es costosa. Según la legislación del 2001, que es de ámbito nacional. Además de los requisitos de localización se han de cumplir los de control de aguas y preparación del suelo, que debe ser impermeable. Normalmente hay una barrera natural de arcilla y otra artificial, además de una zona de drenaje que permita la recogida de lixiviados.
¿Cuándo se realiza la vigilancia?
Una vez que el basurero está en marcha es necesario realizar continuos controles de lixiviados, pero también de la acumulación y emisión de gases. La legislación establece que se recogerán y aprovecharán para producir energía. En el caso de que eso no sea posible, se quemarán. Además se establece que es necesario «reducir al mínimo inevitable las molestias y riesgos procedentes del vertedero debido; emisión de olores y polvo, materiales transportados por el viento, ruido y tráfico, aves, parásitos e insectos, formación de aerosoles e incendios». Para el técnico municipal Ángel Loureiro, los incumplimientos más habituales no tienen que ver con la instalación sino con el depósito de la basura. La forma más adecuada es en pacas que se han de prensar para utilizar el menor espacio posible. Ahora es más habitual que se haga de la forma correcta.
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