El conselleiro de Economía e Industria inauguró Foro Voz hablando de la recién creada Axencia Galega de Industria Forestal
22 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El regidor pontecesán y presidente de la Fundación Pondal, Xosé Lois García Carballido, cedió la palabra tras su breve intervención al conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, que fue el encargado de inaugurar el foro y exponer sus ideas.
Comenzó subrayando la acertada convocatoria realizada para la cita, pues en la sede de la Fundación estaban presentes tanto representantes de la administración pública -tanto autonómica como municipal-, del sector industrial, del ámbito del conocimiento y también numerosos propietarios de terrenos. «É necesaria a implicación de todos os sectores e de todos nós para que este sector tire pola economía», apuntaba Conde.
De este modo, además de hacer referencia al indiscutible valor medio ambiental de los bosques, aludió también a su condición de fuente de riqueza y al necesario trabajo por el fortalecimiento de su industria. «Hai que compatibilizar o rural con esta nova economía dada nos últimos tempos». Así, las palabras «innovación», «adaptación» y «modernización» sonaron con fuerza a lo largo de toda su intervención, así como la necesaria implantación de la certificación de la madera, un salto cualitativo que será imprescindible en los próximos años. También aludió a la apuesta por la formación de los más jóvenes para así cubrir puestos de trabajo que requieren de una gran especialización y adaptarse a las necesidades formuladas por cada empresa.
A este respecto se pronunció también Luis García, que ve necesario analizar con detalle qué pide exactamente el sector industrial y formular políticas que se adapten a sus necesidades. «Son moitos os que acoden a Galicia buscando recursos dende fóra da nosa comunidade e hai que demostrarlles as nosas potencialidades e a nosa capacidade de adaptarnos», apuntaba ayer.
Una jovencísima Axencia
Con apenas cuatro semanas de existencia y con un economista brionés a la cabeza, la Axencia Galega da Industria Forestal está aún despegando y tratando de hacerse hueco para convertirse en el órgano de referencia a nivel autonómico. «Viamos xa necesaria a existencia dunha axencia específica que traballase man a man coa industria», explicaba el conselleiro Francisco Conde, «que se compaxinará coa planificación ordenada dos montes».
José Ignacio Lema asume desde hace apenas unas semanas la dirección xeral de una Axencia que, pese a su corta existencia, ya se ha fijado unos objetivos muy claros, que serían: «Incrementar o valor do monte, fomentar a creación de empresas, incentivar a formación e a innovación tecnolóxica e aumentar a nosa presenza nos mercados internacionais», enumeraba ayer Conde. Aunque podrían resumirse en una única máxima, y es la de lograr «que o forestal teña o valor que se merece e que logre xerar emprego e riqueza».
«No futuro os coches serán de madeira e, sen dúbida, hai que aproveitar ese tirón»
Al hilo de lo expuesto por el conselleiro Francisco Conde, los tres ponentes también apuntaron unas ideas en cuanto a la rentabilización de un recurso que, pese a ser de lo más abundante, nunca a llegado a explotarse del todo.
José Manuel Iglesias, presidente del Clúster da Madeira, incluso definía al sector como «o mellor plan de pensións que poidamos ter» y lo comparaba con las inversiones realizadas en el sector inmobiliario, aunque sin la peligrosa burbuja que caracteriza a este último.
Luis García sugería en este sentido tomar como referencia otros sectores que en el pasado apostaron por la actualización de sus políticas y la innovación en sus procesos de fabricación. Así, mencionaba el sector lácteo que, aunque no pasa por su mejor momento, sí ha sufrido una interesante transformación en los últimos 25 años. Un par de cifras lo resumen: de las 100.000 explotaciones ganaderas que había en Galicia en 1992 hoy quedan 8.000, y cada vez más profesionalizadas (un aspecto clave).
También habría que fijarse, indicaban los expertos, en experiencias positivas de gestión del terreno forestal que se implantaron en determinadas zonas de Galicia y que conllevaron a una mejor ordenación del territorio y a la drástica reducción de los incendios. Para esto, opina Luis García, es necesaria la intervención de una persona (o agrupación) que asuma la figura de líder y guíe tanto a una comunidad de propietarios como a un grupo de vecinos para sumar fuerzas y obtener mejores resultados.
No solo se ganaría en sencillez a la hora de gestionar las propiedades, sino también en competitividad y en atractivo de cara a las empresas. «O mercado ten unha forza que arrasa con todo», explicaba el presidente del Clúster durante su intervención. «No futuro, os coches serán de madeira; de feito, xa se están fabricando algunhas pezas deste material; sen dúbida, hai que aproveitar ese tirón» explica Iglesias. La madera es un recurso sostenible y reemplazable, «talas unha árbore e podes colocar outra no sitio, o petróleo esgotarase nalgún momento, tarde ou cedo».
Incendios
No pinta bien la situación para algunos concellos gallegos en los que más del 50 % de su territorio ha resultado arrasado por las llamas. El primer paso a seguir, explica Iglesias, será la retirada de toda la madera quemada para su aprovechamiento por parte de las empresas del sector.