El conjunto carballés no pudo con un Móstoles que jugó con diez desde el minuto 43. Por tanto, todo sigue igual para el cuadro bergantiñán
27 feb 2022 . Actualizado a las 22:39 h.Un querer y no poder. Así se podría resumir el encuentro del Bergantiños con el Móstoles (1-1) este domingo en El Soto, en donde fueron muy superiores a uno de los mejores locales del campeonato. Y eso que había bajas tan importantes como las de Agulló o Chapu, pero los fichajes de invierno demostraron porque hacían tanta falta. Hugo Díaz se hizo gigante en el centro de la zaga, y Christian se estrenó como goleador. Aunque no fue suficiente, porque, pese a jugar con uno más desde el final de la primera parte, los carballeses no consiguieron traer de vuelta unos tres puntos que los meterían de lleno en la lucha por el ascenso.
Sabía el Bergantiños que el gran peligro de los locales tenía nombre y apellido: Álvaro Sánchez. Pero ni así. Al tercer máximo goleador de la categoría solo le hicieron falta siete minutos para mandar a la red un gran cabezazo. Un mes después, los carballeses volvían a estar por debajo en el marcador, aunque por poco tiempo. Porque un gran pase de Remeseiro a campo abierto encontró un rapidísimo Christian Martínez, que definió a la perfección en el uno para uno ante Tejero, transformando su primer gol como delantero del Bergan.
A partir de entonces, los de Lemos se pusieron a hacer lo que mejor saben. Mandar. Y lo hicieron muy beneficiados por el sistema. Porque la participación de los carrileros, Yelco y Brais, y la movilidad de los dos puntas, Escobar y Christian, no paró de generar espacios. Carlos tuvo el segundo en una vaselina que se marchó rozando el palo y, ya en el 43, Escobar retó a una carrera a un Álex Rodríguez, que no encontró otra forma de pararlo que con un codazo. Segunda amarilla y falta en el pico del área que a punto estuvo de suponer el segundo tras un potente disparo del capitán, Remeseiro.
Mejoró el Móstoles en la segunda parte pese a tener un hombre menos, aunque siguió siendo el Bergan el que dominaba el encuentro. Escobar hizo el segundo tras un error de Tejero que salvó el colegiado señalando un contacto muy leve. Boedo, Concheiro y Cano cambiaron el dibujo táctico, pero ni así fueron capaces de crear ocasiones de peligro ante un equipo que se replegó para proteger el empate. Solo en jugadas a balón parado, Christian y Boedo pudieron hacer el segundo, que nunca llegó.
Con este empate, todo sigue igual para el Bergan, que podría haber aprovechado la igualada de Palencia y Leganés B en la tarde del sábado para meterse en los puestos que dan acceso a la fase de ascenso. No obstante, son ya siete puntos los que le separan de la zona del descenso directo, y eso que todavía tienen un partido menos.
«En caliente puede saber a poco, pero hay que valorarlo en su medida»
El técnico del Bergantiños, José Luis Lemos, reivindicó el mérito de empatar en un campo tan complicado como El Soto, aunque admitió que el partido le dejó un sabor agridulce: «Sobre todo porque hicimos un gran primer tiempo pese a encajar gol en la primera acción, pero posicionalmente teníamos muy controlado el partido, sin sufrir y manejando el balón». Sin embargo, la expulsión que dejó con uno menos a los locales no favoreció a los visitantes, que empeoraron tras el descanso: «Nos costó mucho en el segundo tiempo porque apareció esa prisa por darle una velocidad más para aprovechar espacios, y entre el campo, que estaba seco y muy irregular, y el rival no fuimos capaces de dominar como sí lo habíamos hecho antes».
Pero aunque no fuesen los tres puntos, el Bergantiños sí se llevó una victoria de Móstoles, la del enfrentamiento directo. «Ahora en caliente nos sabe a poco, pero hay que valorarlo en su medida porque tenemos ganado el goalaverage y puede que eso también tenga su peso a final de temporada», dijo el preparador. Una temporada que si hay que definir con una palabra, no sería otra que igualada: «Es una liga que no se da roto. Estamos muy equilibrados todos y cuesta muchísimo ganar cada punto». Respecto al tanto anulado a Antón Escobar, por una supuesta mano, dijo: «Nosotros creemos que no le da, pero el linier, sí. Aunque Escobar dice que no la golpea con la mano en ningún momento».
Sea como sea, el míster ya está con la mente puesta en el choque ante el Leganés B: «Otro rival parejo al que ya ganamos en su casa. A intentar sumar tres puntos, que nos darían un salto importante en la clasificación, haciéndonos fuertes en casa, que lo estamos haciendo bien».