Una joven de Cuba triunfa en YouTube contando sus experiencias desde que se mudó a Carballo
CARBALLO
Algunos de los vídeos de Ana Laura Mateu grabados en el municipio carballés tienen cerca de 500.000 visualizaciones y otros superan el millón. «La situación en la isla es insostenible, está peor que nunca», cuenta
07 ene 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Lleva viviendo en Carballo poco más de mes y medio. No conoce a mucha gente. Sin embargo, los vídeos que graba y sube a Youtube ya han conquistado a numerosas personas del municipio y sobre todo de fuera. Ana Laura Mateu Díaz, conocida en las distintas plataformas digitales como Anita Mateu, tiene 26 años y ha emigrado desde Cuba. Concretamente, desde la provincia de Matanzas, al oeste de la isla. «La situación allí es insostenible, está peor que nunca, con apagones eléctricos y una emigración masiva», explica.
Quería marcharse del país desde hacía ya mucho tiempo. Fue gracias a una amiga que tenía en la capital de Bergantiños como llegó hasta aquí. «Tengo más familia en España, aunque lejos. Ahora vivo en un piso con mi pareja, que también se fue de Cuba», comenta. Reside en el centro de la localidad. De hecho, lugares tan característicos como la zona del San Martiño, el centro comercial o las principales calles son los escenarios de sus filmaciones, que rondan las 500.000 visualizaciones. La mayoría, procedentes de España. En otras grabaciones anteriores, hechas desde el país insular, supera el millón, con los Estados Unidos, México y Colombia como principales territorios recepcionistas. «En Cuba, internet es muy caro y va lento», apunta.
Tiene 341.000 suscriptores en YouTube y 69.663 seguidores en Instagram. Más actividad genera en otras redes como TikTok. Lo cierto es que a día de hoy le permite ganarse un sueldo de unos mil euros, aunque cada mes es distinto, asegura, con subidas y bajadas. Todo depende del éxito que obtengan los vídeos, ya que en base a eso funcionan los anuncios, que es lo que realmente da el dinero.
Comenzó a ser yutubera con 22 años. El hilo de sus creaciones es la dura realidad que viven los cubanos en su día a día en la isla. Según explica, fue una publicación realizada en el 2022 la que la dio a conocer de forma masiva. No es para menos. En ella cuenta que hasta ahora, trabajando de lo que estudió para el Estado cubano (ingeniería industrial, aunque allí la carrera forma en cómo administrar empresas), ganaba lo que aquí vendrían siendo unos 25 euros al mes. «No me alcanzaban para nada. Allá, en el supermercado, un trozo de carne ya te cuesta más», relata. Según comenta, todo el mundo que cursa estudios superiores está obligado a trabajar tres años para el Gobierno: «Pero lo poco que ganas y el mal trato, te quita la ilusión, por eso ahora los jóvenes ya no quieren estudiar». Youtube le ayudó a ir tirando estos años, aunque tuvo que ser cauta con lo que en ellos decía «para no tener problemas», asegura. El control es «brutal». Además, según detalla, en los comercios se encuentran con otros muchos problemas: «Cobramos en pesos cubanos, pero para comprar en las tiendas necesitas dólares, y no hay quien te los cambie. Tienes que depender de que te los envíen de fuera. Además, escasean los alimentos, están racionados...».
Todas estas impresiones las comparte la joven en sus vídeos y las compara con la nueva y grata realidad que se ha encontrado en la Costa da Morte. En ellos se muestra asombrada porque muchos coches pasen la noche fuera, en la calle: «Allá te lo roban», dice. También por poder beber agua de la traída y por lo introducidas que están las mascotas en la vida pública. «Tengo una perrita y allí no la podía llevar a ningún sitio», expresa. Los mariscos también la sorprendieron: «En Cuba no los hay pese a ser una isla». Las tapas gratis en los bares, que los negocios cierren al mediodía, la carne de res en las estanterías llenas de las tiendas, el pan, las fresas... la lista es infinita. Para ella, el día a día aquí es «un lujo»: «Pasar del tercer mundo al primero».
Durante este tiempo, viajó a Barcelona, entre otros sitios, pero dice preferir lugares como Carballo, «más tranquilos». De hecho, así lo recomendará en un próximo vídeo que ya prepara y que tendrá Razo como escenario: «Los paisajes de aquí, de distintos colores, es lo que más me ha gustado. El clima también fue un cambio importante, pero no me desagrada», comenta. Es este trozo de costa lo que más le recuerda a Matanzas, salvando las distancias. Más lugares irá descubriendo, pues lo cierto es que aún acaba de aterrizar casi y todavía tiene mucho que recorrer.
Lo que más extraña es a sus padres y al resto de familia que sigue en Cuba. «Como todo cubano les ayudo y espero que algún día puedan venir», manifiesta. Su pareja le ayuda con los rodajes y en otras cuestiones mientras acaban de instalarse y descubren el nuevo presente juntos.