Después de la pandemia, han surgido nuevos negocios de restauración, también en Baldaio
22 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Razo es conocido por su extenso arenal y las buenas olas para surfear. Numerosos turistas, entre ellos, rostros conocidos, escogen esta playa de Carballo para disfrutar de las vacaciones de verano.
Después de la pandemia, la zona ha dado un gran salto en servicios, sobre todo, de hostelería y restauración, aunque también de alojamientos, para responder a esa alta demanda, especialmente, en los meses de calor.
Producto local
Llaman la atención tres nuevos restaurantes situados en el paseo principal. Cada uno tiene su esencia. Sin embargo, todos tienen una clara apuesta por los pescados y los mariscos de la Costa da Morte.
El Golfo Nordés es un chiringuito. Sin embargo, llama la atención su cocina, basada en la parrilla. Allí es posible degustar un rodaballo comprado en las lonjas de Malpica, Laxe o A Coruña al pil-pil o unos tomates plantados en el propio invernadero del gerente, Antonio Añón, Necho, a la brasa. Es de Razo y tiene 40 años. Su iniciativa fue reconocida con un Solete de la Guía Repsol.
«Estiven traballando na grella por Xapón, Miami ou México, e quería vir para a casa. Dende pequeno quería montar algo aquí. Merquei a outra parte da finca e agora ultimo o proxecto para abrir todo o ano, non só no estío», explica. Está satisfecho con la respuesta de la clientela: «Vese que facía falta algo así. En xeral, eu entendo que cantos máis servizos se dean, cantos máis negocios de calidade haxa, máis demanda xeras, pois é un reclamo». Cuenta con nueve trabajadores.
Alojamientos
Muy cerca se encuentra el restaurante Arnados, que además prevé abrir para agosto cinco apartamentos turísticos. Luis Rodríguez Facal es vecino de Carballo. Lleva toda la vida ligado a una empresa del sector del acero, pero a sus 57 años decidió montar su propio negocio junto a su mujer, Pilar. Era algo que siempre tuvo en su mente desde que de joven trabajara en la hostelería, según manifestó a La Voz. Y en Razo encontró «todo o que precisa un emprendedor». «Hai anos, a xente viña en coche, daba unha volta e marchaba. Agora quedan a comer ou tomar algo e os turistas incluso a durmir», señaló.
Están en régimen de alquiler y trabajan los arroces, entre otros platos. La acogida ha sido «moi boa», afirmó ayer el encargado de la sala, Jesús Gende. Tienen ocho personas en plantilla.
Reaperturas
El Náutico de Razo es otro de los negocios que abrió sus puertas en los últimos tiempos. En este caso, se trata de una reapertura, pero que también tiene su aquel. El matrimonio formado por Felisa García y Jesús Fernández, cuando ya está «máis preto do retiro que de outra cousa», dicen, decidió volver a tomar las riendas del restaurante que pusieron en marcha ya en el año 1995. «Fomos pioneiros xunto co Cordobés», recuerdan. Para ello, lo reformaron totalmente y pasaron a trabajar con una carta (antes celebraban eventos), y mismo pusieron en marcha un hostal de 17 habitaciones. «Traballamos cos produtos da tempada. Rape, San Martiño... Facémolos á prancha, ó forno ou en caldeirada», comentan. «Razo é un sitio privilexiado, non o temos valorado. Os estranxeiros que veñen din que é un paraíso», añaden.
Ya en Baldaio, la parrillada As Saíñas reabrió este mismo verano con nueva gerencia. Miguel Calvo decide continuar con el mesón que iniciaron sus padres, ahora jubilados. Tiene 44 años y lleva más de media vida atendiendo la sala del local. Con una cocina tradicional, son conocidos por el churrasco.
Si en Razo sigue al pie del cañón el Cordobés, en Baldaio sucede lo mismo con la marisquería A Pedra do Sal, por citar algunos ejemplos.
Bares
En Razo, además, también hubo una renovación en varios bares. Sucedió con el Nordés, una terraza abierta que fue levantada ex profeso, y con el Terra, el antiguo Eirís.
Son servicios, todos ellos, que multiplican la oferta para visitar este ya de por sí punto de atracción turística, ahora, también, en la temporada baja.