Pasarela de alcaldes y ediles con disfraz: así se «mojaron» los de la Costa da Morte
CARBALLO
Meterse en el papel de carnaval también va en el cargo, y unos cuantos han dado la talla: ¡echa un vistazo!
19 feb 2024 . Actualizado a las 22:17 h.Desde el primer concurso de entroido en la Costa da Morte, el de Vimianzo, hasta el último, el de Baíñas, se han visto entre los entroideiros a un buen número de alcaldes, alcaldesas y técnicos que también se animaron con los disfraces. No todos lo hicieron, ojo, y seguro que más que los que constan en estas imágenes, pero es una buena muestra del imaginario municipal.
Llamativa, desde luego, la regidora de Vimianzo, Mónica Rodríguez, que optó junto con todo su equipo por la señalética, de seguridad y obras. Ella se vistió con señales de las 14 parroquias vimiancesas. «E logo ti... de onde vés sendo?», preguntaba su casco en la parte delantera. «Vimianzo», respondía por atrás. Pero Vimianzo son microidentidades y ella las fue reafirmando, además de con estos indicadores, a base de chapas que iba entregando.
Explicaba días atrás que la idea del disfraz vino de pulsar el «sentimento» por cada una de las parroquias, y la intención de su gobierno de llegar a todas ellas, «mimalas», con cultura, deportes o servicios. También en Baíñas se disfrazó el grupo de gobierno local, en esta ocasión de hippies, temática que asimismo inspiró a la alcaldesa de Cee, Margarita Lamela.
Peculiar, desde luego, el atuendo del ejecutivo de la villa del encaixe, que se armó trajes a base de recortes de periódico, para convertirse en A Voz de Camariñas, centrándose en las buenas noticias, presumiendo de patrimonio y de Mostra. La alcaldesa, Sandra Insua, hasta se hizo un bolso con su historia familiar, publicada en el suplemento Yes de La Voz. Por un aire tipo Aladdin optó el regidor zasense, Manuel Muíño.
Divertidas se vieron por Carballo, entre otras, la edila Maruxa Suárez, parte del jurado, o la técnica Carmen Castro, de un elegante negro para enterrar la sardiña. Por otra especie, la abeja, optó Áurea Domínguez, regidora de Fisterra.
Y si la cosa fuese de espectáculo, merecería mención aparte el técnico de Deportes dumbriés, César Ferrío, que se convirtió este año en FerriTina Turner: pelo, vestido y el desempeño sobre el escenario con The best causaron furor. Gustó el colorido esmoquin del alcalde, Raúl González, y ya tiene su aquel que, en un concello sin plaza de Policía Local, ejerciese de agente, por un día, el edil Iván Pequeño.