Disfrutar no es sinónimo de ensuciar ni contaminar. Es aterrador ver como quedan muchos campos y plazas después de las verbenas. Imágenes dantescas que dicen muy poco del ser humano. Administraciones, orquestas y público deben concienciarse de que fiesta no puede ser sinónimo de estercolero. Lo que se gasta en limpiar no se gasta en servicios e inversiones. Es tirar el dinero. Es responsabilidad de todos evitarlo.