Regístrate gratis y recibe en tu correo las principales noticias del día

«Difícil entender o CEIP Fogar sen Liso»

Marta López CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

ANA GARCIA

El que fue conserje en el centro durante 27 años recibió ayer un emotivo homenaje

24 dic 2020 . Actualizado a las 12:13 h.

Hay algo entrañable en la figura de los conserjes de los colegios. Su relación con niños, padres y maestros llega a ser tan estrecha, que ya es considerado uno más de la familia. Liso iba para 28 años en el CEIP Fogar de Carballo. Curaba a los pequeños cuando se hacían alguna herida, les llevaba a casa cuando perdían el autobús... Hacía mucho más, reconoce el director, de lo que le correspondía como conserje.

Para devolverle parte de ese cariño que él dio desinteresadamente durante años, toda la comunidad educativa le rindió ayer un emotivo homenaje que llevó a Liso hasta las lágrimas. El Fogar es uno de los centros con más alumnos de Galicia, pero nadie quiso perderse el bonito momento.

ANA GARCIA

El conserje fue recorriendo las diferentes estancias del colegio entre los aplausos de niños y docentes que le arroparon a ambos lados, haciéndole un pasillo de honor. Liso, tremendamente emocionado, se encontró con bonitas palabras y carteles de agradecimiento, hasta de los más pequeños.

«Estivo tremendamente emocionado», explicó ayer el director, Fernando Garea. «Ademais, espontaneamente moita xente pasouse por aquí para darlle o seu cariño neste momento, no momento da súa xubilación despois de case 28 anos aquí», resaltó.

Trató a varias generaciones de carballeses. Miles y miles de niños que ahora son ya padres, y cuyos hijos van también al Fogar. Un vínculo de ese tipo es difícil de romper y, de hecho, Garea reconoce que será prácticamente imposible llenar el hueco que deja Liso: «Será moi difícil entender o Fogar sen el. Cando cheguei a Carballo, no ano 2000, el foi o que me ensinou a entender este centro e a querer Carballo. Creo que é unha persoa non só imprescindible, senón tamén irrepetible», apunta Fernando.

ANA GARCIA

Los niños, como es lógico, se quedaron apenados por su marcha. Los de sexto, tutorizados por el propio director, incluso le preguntaron al docente si habría alguna forma de convencerle para que se quedase un tiempo más. «El identificou, e identifica, os valores do colexio Fogar. Esa entrega á ensinanza é unha maneira de entender a vida, non un traballo. Aínda así, a xente que se vai, nunca chega a irse de todo, porque continúan implicados na comunidade educativa e asistindo aos actos e homenaxes», puntualiza Garea.

Este ha sido un año de «complicacións», pero desde el centro no quisieron dejar a Eliseo Lista Theodosio sin su merecido homenaje.