Martín Lamelas Domínguez, extremo del Bergantiños: «Si salí de Ourense y vine a Carballo fue para luchar por el ascenso»

Siendo zurdo nato -tiene un verdadero guante en su pierna izquierda-, el entrenador del Bergantiños, José Luis Lemos, lo suele utilizar como extremo derecho, es decir, a pierna cambiada. Se trata de uno de los mejores fichajes del club carballés de los últimos años. Martín Lamelas Domínguez (1993, Ourense), residía en A Ponte Ourense y sus padres regentan el bar A Moncloa. En septiembre hizo las maletas y cubrió los 160 kilómetros que separan su Ourense natal de Carballo para enrolarse en el Bergantiños, que hoy (16.00 horas) se mide en A Grela al Silva. Martín Lamelas se define como una persona muy autoexigente y competitiva: «Soy consciente de que tengo que dar un punto más de mí, pero entre el covid-19, los contratiempos de la pandemia, los aplazamientos de los partidos... Todo influye, pero no valen las excusas, porque así estamos todos». Pese a esa autocrítica, el hábil extremo carballés suma cuatro goles y otras tantas asistencias en liga.

-¿Cómo valora sus primeros meses en Carballo?

-Muy bien la verdad. El club, los compañeros, el cuerpo técnico... Todos me ayudan a integrarme y eso es siempre de agradecer. Cendán, el presidente, Lemos... Todos están pendientes de mí. En ese sentido, el Bergantiños es un club único por lo cómodo que te hacen sentir. Yo vengo de Ourense, de estar con mi familia. Fichar por el Bergantiños supuso, por así decirlo, salir de mi casa para enfrentarme a un nuevo reto. Cuando vine por primera a Carballo con mis padres la verdad es que quedaron encantados con el trato del club, por eso fiche. Todo lo demás depende ya de mí.

-¿Cómo surgió lo de venir a Carballo?

-En verano había alguna propuesta para Segunda B, pero nada concreto. Había que esperar y esa sensación de tener que esperar no me hizo sentir muy cómodo y fue cuando salió la propuesta de venir a Carballo.

-¿Por qué le dijo que sí al Bergantiños?

-Porque es un club que aspira a todo. Para mí es un reto porque supuso salir de mi zona de confort, que es Ourense, para pelear por subir a Segunda B y hacerlo además con un equipo de mi tierra, que es Galicia.

-¿Por cuánto tiempo fichó?

-En principio por esta temporada.

-¿Cómo lleva lo del covid?

-Yo fui el primer positivo en el Bergantiños y estuve catorce días en cuarentena. Eso afecta en lo anímico, pero también en lo deportivo, porque aunque en casa hacía el trabajo físico que me encargaban los técnicos, no es lo mismo que estar entrenando a tope con los compañeros. Yo estaba en casa y mis compañeros andaban como motos, por eso para mí era muy importante coger el tono físico y recuperar las buenas sensaciones lo antes posible.

-Parece que lo ha conseguido. Sus estadísticas y el hecho de que José Luis Lemos cuente con usted de forma asidua, lo avalan.

-Le estoy muy agradecido a Lemos porque es un entrenador que confía en mí, pero como le he dicho, tengo que dar un punto más.

-¿Cómo afecta la pandemia al equipo?

-Supongo que como a todos. No hay esa regularidad de otras temporadas. Puedes tener partido entre semana y de repente estar quince días sin jugar. Pero es lo que toca. Lo importante es cuidarse y respetar las normas y los protocolos sanitarios porque al fin y al cabo es tu salud y la de los que te rodean lo que está en juego.

-¿Teme que este largo parón navideño [el último partido fue el 27 de diciembre] afecte a la dinámica de juego y resultados que venía cosechando el equipo?

-Por la forma en cómo entrenamos, creo que no nos va a afectar.

-¿Es consciente de que los términos Bergantiños y Segunda B van juntos de la mano?

-Sí, está claro que el objetivo del club y del equipo es subir, por eso vine a Carballo. Sino, seguiría en Ourense. Vine aquí para pelear por el ascenso.

-¿Sería un fracaso no conseguir este anhelado premio?

-Hay que matizar el concepto fracaso. Hay que ver cómo se ha dado, por qué se ha dado... Hay muchos condicionantes, pero, para mí, en términos generales, sí se podría decir que es un fracaso porque tenemos un gran equipo, un gran proyecto, un gran club y una gran estructura deportiva para conseguirlo. Pero al final todo lo determinan los resultados, está claro.

-Van líderes en el grupo A de la Tercera División, y si se mira el cómputo global del grupo A y del B también lo son.

-Y eso que empezamos con dos empates en liga [Paiosaco y Silva]. No recuerdo un partido en Tercera en el que un equipo tuviera tantas ocasiones de gol como las que tuvimos en Paiosaco y, sin embargo, empatamos. Pero el entrenador siempre confió en nosotros y nos animó a seguir así. Nos dijo que jugando así los resultados llegarían, y así ha sido.

-Dígame el nombre de un jugador del Bergantiños que a usted le impresione en el campo.

-Todos somos importantes, cada uno en su parcela. Sería injusto personalizar.

-¿Cómo lleva vivir en Carballo?

-La verdad es que cuando me hablaron de venir a Carballo me lo imaginaba como un pueblo pequeño, como los que hay en Ourense. Pero hablamos de 31.000 habitantes, de mucho ambiente, de mucha gente joven por la calle... Recuerdo que llegué un domingo de feria y había un ambiente increíble. Fue lo primero que me llamó la atención.

-¿Y su lugar preferido?

-La playa de Razo. Siempre que puedo me escapo a Razo a dar una vuelta. Es precioso.

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