Si el juez no reconsidera su decisión se perderían 47 empleos en A Pereira y O Pino
04 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El grupo Teodoro García Trabadelo (TGT) ya ha recurrido el auto del Juzgado de lo Mercantil Número 1 de A Coruña, que impide la venta de las empresas Lácteos Pérez Olveira y Alimentos Ruta Xacobea, que se encuentran en liquidación desde el año pasado. Los 47 trabajadores de las dos firmas tienen previsto instar al administrador concursal a que haga lo propio, según informa Fran Cousillas del sindicato USO, que mañana celebrará con ellos una asamblea en la fábrica de A Pereira (Santa Comba) porque todos entienden que esta es la mejor fórmula, por no decir la única, para mantener el empleo y que no se destruya por completo esta actividad industrial de transformación de productos lácteos.
El juez Zigor Oyarbide De la Torre rechazó la venta porque, en términos muy resumidos, entiende que TGT formulaba unas exigencias en tono imperativo que él no puede admitir ni reflejar en un auto cuestiones que podrían ser contrarias a derecho. «El juez del concurso no puede atribuirse competencia para exonerar todo tipo de deuda laboral y de la Seguridad Social en particular, como se pretende, de tal manera que la sucesión de empresa a efectos laborales y de la Seguridad Social, si se produce, lo será ajeno a la voluntad del juez del concurso», señala literalmente.
De no ser por ese particular, el magistrado sí admite que «la venta de la unidad productiva es la opción preferente del legislador concursal en cualquier estado del procedimiento concursal, y más si estamos en fase de liquidación». Es más, da cuenta de que existe el acuerdo por parte de los trabajadores y que, una vez transcurridos los plazos legales, ninguno de los acreedores, que son numerosos y van desde entidades de crédito hasta ganaderos pasando por el propio Estado, ha formulado alegación alguna.
En otras palabras, todas las partes entienden que esta es la mejor fórmula para sacar a las empresas del atolladero en el que se encuentran desde hace años, pero el juez determina que tal como está planteada la oferta de TGT no puede aceptarla.
Sin embargo, la compañía catalana, que goza de una posición muy relevante en este mercado y es también uno de los acreedores de las empresas que tuvieron un origen familiar en Olveira (Dumbría), en primer lugar se disculpa y luego aclara que, para nada, está pidiendo algo contrario a la ley. «TGT quiere pedir disculpas al Juzgado, pues, en ningún caso, era -ni es- intención de esta parte indicar de manera imperativa en qué manera y con qué contenido debe el juzgador resolver las cuestiones y controversias que son sometidas a su competencia», señala la firma en su recurso en que «lamenta que el contenido de la oferta presentada y, en particular, el lenguaje contenido en la misma llevase a ese entendimiento, pues nada más lejos de lo pretendido por esta parte».
A partir de ahí, la representación legal del grupo, incide en que no está pidiendo que se le exonere de cargas laborales. De hecho, en su oferta ya señala que asume a los trabajadores y los salarios impagados. Lo que dice es que no se hará cargo de la parte que ya cubre el FOGASA y que no quiere responder por más deudas que las ya asumidas en la oferta, lo que por otra parte es lo habitual en este tipo de procedimientos.
«Agora mesmo as empresas son viables se se fai cargo TGT e hai en xogo 47 postos de traballo directos, ademais que cerca de 200 explotacións dependen disto, ao marxe tamén das compras de Leitegal. A todo iso hai que sumar os gandeiros que xa non lle venden leite, pero cos que aínda mantén débedas», explica Fran Cousillas, del sindicato USO, para quien, «se non se compran, as empresas están en liquidación e o que lles espera é o peche e a subasta pública», algo que ve como un final casi seguro.
5.667.184 €
Lo que ofrece TGT
Es la cuantía global que el Grupo catalán Teodoro García Trabadelo da por las empresas.
859.876 €
En efectivo
Son para repartir prorrateados entre Lácteos Pérez Olveira y Alimentos Ruta Xacobea.
4.396.192 €
Retenidos para deudas
Des esos 4,3 millones la gran mayoría son para hacer frente a un crédito especial impagado.