El laxense José Manuel Pato ha patentado un dispositivo para medir numerosos parámetros de manera sencilla
07 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El empresario y emprendedor José Manuel Pato, residente en laxe desde 1987, acaba de dar un nuevo paso en su carrera como inventor, que también la tiene, y muy consolidada. Su nueva creación es un «dispositivo de datos de salud» para recabar datos biométricos y fisiológicos de las personas que lo único que deben hacer para esa medición es acostarse. Nada más: ni siquiera es obligada una postura concreta.
La clave está en los sensores que se colocan en una doble sábana bajera (las inferiores de la cama): permiten una lectura en tiempo real de temperatura corporal, peso, índice de masa corporal, biorritmos, lecturas del suelo, monitorización de la actividad cardiovascular, nivel de oxígeno en sangre, presión arterial y hasta grabar electrocardiogramas, que se pueden enviar al centro médico para monitorizarlos y detectar la fibrilación auricular. También registra la temperatura y la humedad del aire. Incluye un miniordenador y los resultados pueden verse en una pantalla en la propia cama, o bien en cualquier dispositivo . Los potenciales usuarios son, sobre todo, los enfermos, o que sufren alguna afección, pero también es apto para cualquier particular que quiera controlar su salud.
Esta invención, que ya ha pasado todos los filtros legales y técnicos y superados los análisis correspondientes, deberá desarrollarse ahora. Pato está en contacto con dos universidades gallegas, en concreto en sus áreas especializadas en biomedicina, y podrían entrar otras europeas. Un grupo internacional con sede en Copenhague también ha establecido contacto para una posible financiación. El inventor también está abierto a la iniciativa privada. Pato señala que ofrece «notables ventajas» sobre otros medios existentes con finalidades análogas.
Pato González ha diseñado en los últimos años diversos dispositivos relacionados con la salud y seguridad: unos bolardos que se izan en los pasos de peatones cuando el semáforo está en rojo para los vehículos (denominado PeATO), un chaleco con sujeción a tierra para los pescadores de caña en la costa (en los casos de máxima fatalidad, el cuerpo nunca va a desaparecer en el mar), y un sistema que garantiza la higiene a los que beben por una lata (un plástico-pegatina en la zona en la que deben posarse los labios).