La peña ciclista Os Trancas apostó, esta vez, por el sur, donde recorrió 270 kilómetros entre el jueves y ayer
12 abr 2023 . Actualizado a las 15:40 h.Hace más de diez años que un grupo de amigos creó en Muxía la peña ciclista Os Trancas con el objetivo de compartir su pasión por las dos ruedas mientras descubrían nuevas rutas. Una misión que pronto comenzaron a cumplir lejos de la Costa da Morte. en la Vía de la Plata, el Camino de Invierno, el Primitivo, el Francés o el Portugués. Sin miedo a coger la furgoneta tan pronto como reúnen cuatro días libres seguidos, han ido descubriendo España subidos a la bicicleta.
Y ayer culminaron su última aventura. En Alcalá de Real, donde finalizaron el tramo de 270 kilómetros que realizaron del Camino Mozárabe, empezando el jueves en Almería, a donde llegaron un día antes desde Muxía.
Víctor Figueroa, José Costa, Jesús Ramos, Martín Salgado y David López fueron, finalmente, los que conformaron la delegación. Cuando idearon el plan, a principios de este 2023, eran dos más, pero unos problemas de salud les impidieron acudir. «Comezamos o xoves ás 8.00 en Almería e rematamos en Abla. O venres fomos ata Guadix, o sábado ata Atarfe e rematamos en Alcalá de Real. Fixemos unha media de entre 60 e 80 quilómetros ao día, saíndo cedo e podendo gozar dos lugares e facer un pouco de turismo», explica Víctor Figueroa, el presidente.
Una máxima, la de permitirse un tiempo libre, que han aprendido gracias a la experiencia: «Nas primeiras viaxes deste tipo facíamos cen ou máis quilómetros ao día e despois xa non nos quedaba tempo nin enerxía para gozar dos lugares polos que pasabamos», señala Figueroa. Sobre la bici, les gustó especialmente el tramo recorrido el sábado, en el que pasaron bastante tiempo pedaleando entre campos de olivos, mientras que sufrieron con la subida a Moclín, cerca de Granada, «unha das máis duras que fixemos nunca».
Precisamente en la ciudad de la Alhambra se vieron sorprendidos por la multitud. «Alí xa sabíamos que ía a haber xente porque non había onde durmir xa dende hai tres meses, pero foi unha tolemia. Non había por onde pasar, tivemos que facelo a pé», cuenta Víctor desde la furgoneta, a más de 1.000 kilómetros de distancia de Muxía y con diez horas por delante de camino para llegar a casa. La parte menos hermosa de la «procesión» de la peña ciclista Os Trancas.