

























Un numeroso público se sumó a la comitiva fúnebre
06 mar 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Sigue el carnaval, a tope en la comarca, y ayer fue el turno del entierro del percebe en Muxía, entre otras actividades en más municipios. Este año, la figura referente a su crustáceo más preciado resultó ser Trump-ulleiro. «Finou no día de onte, dunha enchenta de mentiras», se podía leer en el recordatorio.

Tuvo el habitual cortejo fúnebre por las calles de la localidad, con chocolatada y el acompañamiento del grupo folk local Xaramiños do Corpiño. Hubo lamentos pícaros entre las «viudas», vestidas de negro, aunque algunas de ellas, con llamativas pelucas azules: «Hai que ser fortes», decían en el momento de la quema del logrado elemento, una vez ya en la rambleta. Tampoco faltaron los párrocos, que bailaron al son de la Muiñeira do Santo Amaro, cantada a viva voz y pandereta en mano, y sus bendiciones. El tiempo acompañó, con una tarde realmente bonita, lo que animó la asistencia del público. Hubo hasta fuegos artificiales. Todo, para darle un nuevo impulso a esta tradición.