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«Levo vinte anos á espera dunha senda para que o meu fillo poida ir a Ponteceso»

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

PONTECESO

Pablo Pombo Parga es ayudado por su madre Mercedes de 73 años a empujar la silla de ruedas por un tramo de la carretera entre Lestimoño y Ponteceso que carece de aceras y ellos reclaman
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José Manuel Casal

Mercedes Parga relata las peripecias que tiene que hacer su hijo, Pablo Pombo, de 48 años, si quiere salir de casa

11 dic 2015 . Actualizado a las 16:37 h.

No puede salir de casa para dar un simple paseo por la zona o ir a Ponteceso. Y si lo hace se arriesga a ser arrollado por un vehículo. Tiene que esperar a que sus padres lo lleven en coche. Pablo Pombo Parga tiene 48 años y sufre serios problemas de movilidad como consecuencia de varios percances, el último, hace ahora casi dos años, según relató su madre. Estos accidentes le han obligado a ir en silla de ruedas.

El problema, como relató ayer su progenitora, Mercedes Parga Cambón, de 73 años, es que en Lestimoño, en la parroquia pontecesana de A Graña, carecen de una senda peatonal por la que poder caminar hasta la iglesia de A Graña o a Ponteceso para ir al médico o a la compra. «Levo vinte anos á espera dunha senda para que o meu fillo poida ir a Ponteceso», criticó Mercedes Parga. «A única opción que me queda é levalo eu ou meu marido no coche que temos na casa porque senón non pode saír. ¿Como vai a ir por aí só? ¿Para que o atropelen?», añadió la mujer.

Mercedes explicó que la primera petición para la construcción de un camino paralelo a la carretera la efectuó cuando su hijo sufrió su primer accidente, del que le quedaron algunas secuelas físicas: «Fun varias veces ao Concello para falar co alcalde, pero nada. Moitas promesas, pero a realidade é que vinte anos despois seguimos sen o camiño para ir á igrexa ou a Ponteceso e o meu fillo xa queda na casa».

Sobre sus facultades para coger el volante, Mercedes Parga responde entre risas: «Téñoas perfectas mellor que cando era moza». Y añadió: «Collo o meu coche moitas veces e non me asusto nada». También conduce su esposo, Ramón Pombo Pose, de 74 años. Entre ambos se encargan de facilitar la vida su hijo a la espera de que se construya la ansiada senda peatonal.

Mientras, el alcalde de Ponteceso, Lois García Carballido, anunciaba ayer un proyecto avalado por la Diputación de A Coruña para construir un doble camino en ambos márgenes de la citada vía, actuación valorada en 685.000 euros, y que unirá el lugar de Lestimoño con la iglesia de A Graña.

Este plan de trabajo incluirá la construcción de una red completa de saneamiento y una partida económica de 45.000 euros para la expropiación de los terrenos.

El problema es que esta senda peatonal se llevará a cabo en dirección a Malpica, y no hacia el casco urbano de Ponteceso como pretende la familia. Aunque como señaló Mercedes Parga, «algo é algo».

El Concello invertirá 685.000 euros en construir un doble camino en dirección a A Graña