La inoxidable celosía de galvanizado de grada y techumbre, pese a contar con elementos prefabricados, ha requerido un diseño único
26 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Poco a poco, la grada prefabricada del fondo sur del Ángel Carro adopta su fisonomía definitiva. Ayer comenzaron los trabajos de colocación de la techumbre. El tejado que permitirá a los espectadores cubrirse de las inclemencias del tiempo, ya pasado mañana. Y con total seguridad, porque la estructura (anfiteatro y visera forman un todo indivisible) ha sido diseñada para cumplir con los más altos parámetros de seguridad. Cálculos de ingeniería realizados para Nussli, la multinacional suiza encargada de su montaje, en una oficina especializada en Alemania; modelaje en tres dimensiones, para resistir los vientos más fuertes, nevadas y hasta movimientos sísmicos.
Diseño, pruebas exhaustivas, simulaciones por ordenador específicas, adaptación a las más severas normativas de edificación nacionales, y a las de las Federaciones Deportivas. Todo, para que los aficionados al fútbol se sientan con la misma fiabilidad que en una grada de hormigón. Claro que mucho más ligera, y con tranquilidad absoluta, pese a que sea desmontable. Todo ello lo permite el entramado de acero, material muy elástico, capaz de resistir esfuerzos en los que otros se romperían.
Diseño específico
Y es que la inoxidable celosía de galvanizado de grada y techumbre, pese a contar con elementos prefabricados (lo que facilita transporte y logística), ha requerido un diseño único, con cientos y cientos de páginas de cálculos y planos. De consulta de los datos climatológicos correspondientes a Lugo, comparativas con otros lugares junto a un río, vientos probables. Todo está previsto.
Incluso las no tan inhabituales nieves que caen en la ciudad en el invierno. La lona y la estructura aguantarán perfectamente el peso. Y está conformada para que un operario se suba al techo, con las permanentes medidas de seguridad (respetadas hasta la mínima expresión en la obra), y retire esas nieves.