Mirar hacia arriba sin rubor

Murillo EN ROJIBLANCO

CDLUGO

26 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Diez jornadas cumplidas de la Liga Adelante representan la cuarta parte del campeonato prácticamente. No son definitivas, pero sí indicativas u orientativas. La tercera plaza que ocupa el Lugo no deja de ser circunstancial, máxime cuando la distancia entre los de arriba y los de abajo es mínima. Solo seis puntos separan a los lucenses del Jaén, que ocupa la primera plaza del descenso. O sea, un pañuelo: pierdes dos o tres partidos consecutivos y ya estás abajo; al revés, los ganas, y tocas el ascenso. Entre la gloria y el infierno media un paso. La competición aún no se ha roto, y sólo a partir de ahí se sabrá quién es cada cual. Mientras, nadie debe sentirse seguro. En el seno del Lugo lo saben y no se fían de nadie. Y hacen bien. Por ejemplo, del visitante de mañana, el Sabadell, a un punto del descenso. Es uno de los catorce ilustres de esta Liga Adelante con pasado en Primera. El matusaleno Tamudo encabeza su matrimonio con el gol, y sigue mostrándose como una amenaza para las redes contrarias. Ojo, pues, aunque no será su único argumento ofensivo. Para los de Setién es una oportunidad única de confirmarse en la zona de ascenso. Hay que mirar hacia arriba sin rubor, sin complejos, pero con los pies en el suelo. Recuperar a los tocados Pita, Iván Pérez y Pablo Sánchez, es el objetivo. Hasta hoy por la mañana y después del entrenamiento no habrá lista. En el club hay una especie de euforia contenida, pero nadie quiere dar ningún paso en falso. El fútbol es tan variable como sus circunstancias. Eso sí, hay una firme convicción de acudir al mercado invernal por si surgen refuerzos que mejoren lo que hay. Solo y en ese caso, podrían acometerse. Hay cuatro fichas libres. El club está haciendo historia, con unos parámetros fijos en gastos y filosofía de juego, y la idea es seguir creciendo, sin salirse del guión un ápice.